En ocasiones podemos encontrar puestos con una lista interminable de requerimientos en las ofertas de empleo: grados universitarios, másteres, experiencia, idiomas y competencias casi imposibles. Si el puesto te ha llamado la atención, pero no cumples todos los requisitos que piden, no te desanimes. Te contamos cómo puedes solicitar trabajo, aunque no tengas el «perfil ideal», para que afrontes la próxima oferta con la que te cruces con una actitud más optimista.
Requisitos para solicitar trabajo ¿Importan tanto como creemos?
De cara a cubrir una vacante, las empresas detectan las necesidades que habría de cubrir la persona a la que van a contratar. Aquí entran en juego diferentes factores, como la experiencia del candidato, sus competencias y, por supuesto, su formación.
Existen requisitos que son indispensables. Para un puesto de ingeniería industrial, por ejemplo, es de esperar que se pida el título correspondiente. De no ser así, estarían arriesgándose a fomentar el intrusismo laboral y, lo que es mucho peor, a poner en peligro la seguridad de los trabajadores. Aunque este caso es más extremo, también existen otros ejemplos como contratar a un candidato sin cualidades de liderazgo para un puesto de responsabilidad. La experiencia no sería lo más idóneo para el equipo a su cargo.
Tal y como dictan los ejemplos que te hemos dado, podemos concretar que hay requisitos indispensables que se deben cumplir en las solicitudes de trabajo. No obstante, existen otros en los que los reclutadores tienden a ser más flexibles.
El candidato perfecto no existe, pero el más adecuado sí. Es por eso que existen distintos métodos de selección, como la selección por competencias, enfocada en la capacidad del candidato para orientar su aprendizaje anterior al escenario único de la empresa. Tener 6 años de experiencia en vez de 10 años o saber hablar 2 idiomas con fluidez en vez de 4 pueden ser aspectos menos relevantes que contar con una formación específica o con cualidades indispensables para un puesto.
¿Qué estrategia tomar para presentar una candidatura?
En el caso de no cumplir todos los requisitos de la búsqueda de empleo, intenta tomar otra estrategia y realiza un análisis de la oferta. Hazte estas tres preguntas:
1.- ¿Cuáles son los requisitos indispensables y cuáles puedes cumplir? Compara tu perfil con lo que piden. Si la formación es parecida o has tenido materias comunes, no estás tan lejos del perfil como crees. En el caso de no tener toda la experiencia requerida o, directamente, no tener experiencia, plantéate qué debes llevar a cabo y valora tus cualidades de aprendizaje y adaptación. Pero sobre todo, destácalas y señala tus puntos fuertes.
2.- Antes de enviar el CV, adáptalo. Tener un currículum estándar ayuda en gran medida a postular rápido, pero no siempre es la mejor opción. Para ofertas que te interesen especialmente, trata de listar tareas o competencias que tengas y que puedan servirte de cara al puesto de trabajo. Añadir una carta de presentación en la que hables de manera un poco más extensa acerca de qué puedes aportar y por qué te interesa el empleo te ayudará más de lo que crees.
3.- Detalle imprescindible: cuida las keywords. Si hay mil candidatos que quieran solicitar un trabajo y solo dos reclutadores, la criba inicial se hace imposible de evitar. Para superarla, trata de encontrar cuáles son los criterios imprescindibles. Muchos currículums son descartados por no elegir las keywords de manera inteligente. Analiza la oferta y determina si en tu CV aparecen las palabras clave necesarias.
