Cuando tenemos un familiar hospitalizado, o bien en casa en situación de reposo tras una intervención quirúrgica que no ha necesitado hospitalización, la normativa de empleo contempla la posibilidad de un permiso remunerado, el permiso por hospitalización. De esta forma, se salvaguardan los derechos laborales de los trabajadores y se facilita la conciliación en una situación tan complicada. En este artículo, hablaremos de este permiso y de las modificaciones que ha experimentado.

Características principales del permiso por hospitalización

Cuando tenemos un familiar enfermo o, como estos casos, hospitalizado debido a una enfermedad o por operación quirúrgica, nuestra vida personal y laboral se trastoca enormemente. Por ello, la legislación laboral tiene en cuenta medidas de protección del empleado que flexibilicen las condiciones de trabajo y la situación personal en momentos de extrema necesidad.

Es en ese contexto en el que nacieron los llamados permisos retribuidos de los trabajadores, como el permiso por hospitalización. Las características principales de este permiso, son las siguientes:

  • Se solicita cuando se trata de un familiar hasta el segundo grado, ya sea por afinidad o consanguineidad.
  • También está incluido el familiar consanguíneo de la pareja de hecho, así como de cualquier otra persona que conviva con la persona trabajadora en el mismo domicilio y requiera de su cuidado.
  • Es un permiso con derecho a salario, no es una ausencia justificada ni una baja laboral.
  • Desde el mes de junio de 2023, esta licencia médica contempla un permiso de 5 días, exista o no hospitalización del familiar, y sea o no necesario un desplazamiento.

Otras consideraciones a tener en cuenta sobre este permiso

Aunque este y otros permisos quedan recogidos en la nueva Ley de Familias, una de las principales controversias que ha generado este asunto y sobre el que, incluso, se ha creado jurisprudencia, tiene que ver con la forma de computar dichos días de permiso.

En este sentido, es importante recordar que la justicia laboral ha dictaminado que el permiso por hospitalización, al igual que los demás permisos remunerados, debe tomarse en días laborales, y no computarse en días naturales. Así lo recoge la normativa europea en relación a los derechos del trabajador, y es la interpretación que debe realizarse del artículo 37.3 del Estatuto de los Trabajadores.

También puede provocar dudas todo lo relacionado con el aviso previo a la hospitalización, y con la posibilidad de que la empresa pudiera tomar alguna decisión contra el trabajador al respecto. En este sentido, cabe recordar que, aunque es necesario avisar previamente y justificar la hospitalización, no existe la necesidad de una autorización por parte de la empresa, y tampoco esta puede llevar a cabo ninguna represalia o ejecutar una decisión por el hecho de que el trabajador no haya cumplido con celeridad el aviso.

De hecho, no es necesario solicitar el permiso el día del ingreso, sino que la normativa permite cierta flexibilidad para poder realizarlo durante el periodo total de hospitalización del familiar. Además, la empresa tampoco podrá solicitar al empleado un justificante de la hospitalización o de la operación que este no pueda obtener de forma sencilla, así como cualquier documentación complementaria extraordinaria. El trabajador, además, podrá presentar este justificante una vez finalizada la hospitalización.