Has enviado tu CV, te han llamado para hacer una entrevista, todo ha ido bien y estás satisfecho con el resultado. Hasta has tenido un buen feeling con el entrevistador, y te has mostrado eficiente y resuelto, pero… no te seleccionaron. ¿Qué ha fallado?
Lo primero que hay que saber es que se puede ser un buen candidato y no ser seleccionado. Las probabilidades de ser descartado también aumentan porque los requisitos son muy específicos o la experiencia tiene mucho más valor.
Pero más allá de ser a priori válidos para el puesto, existen una serie de factores que te pueden ayudar a entender porqué no te seleccionaron.
1. No te seleccionaron porque no estás lo suficientemente cualificado
En principio, cuando te llaman para realizar una entrevista, significa que han leído tu currículum y eres un posible candidato. Según el último Informe Infoempleo Adecco sobre oferta y demanda laboral en España, la escasez de profesionales cualificados supone la principal dificultad a la que se enfrentan más de la mitad de las empresas encuestadas.
Por eso, hay que prestar atención y solo optar al puesto cuando se cumpla con los requisitos. Eso sí, conviene no ser excesivamente estrictos en este aspecto: si, por ejemplo, piden una experiencia mínima de 5 años y tienes 4 años de experiencia, y cumples el resto de las exigencias, debes enviar el currículum. Muchas veces este tipo de requerimientos son orientativos.
2. Te han pillado mintiendo sobre tu CV
Si los reclutadores encuentran algún dato inexacto en él o detectan una mentira, te descartarán sin más. Puede resultar especialmente bochornoso que te sometan a alguna prueba (de idioma, informática…) para la que pidan un nivel determinado, y descubran que no estás cualificado y que el conocimiento real no es acorde a lo que cuentas. Para ahorrarte esa situación o lo retiras del currículum o bien puedes adquirir la cualificación que dices que tienes.
3. Han seleccionado a un candidato interno de la compañía
En muchas ocasiones las empresas hacen procesos de selección abiertos, pero pueden terminar decantándose por ascender a un trabajador de la compañía. Bien para dar una imagen de accesibilidad o para hacerse con otros currículum para próximos procesos. No desperdicies la oportunidad de dejar una puerta abierta para otro proceso de selección.
4. La vacante ha sido eliminada o puesta en espera
Esto puede ocurrir después de haber realizado la entrevista. Por ejemplo, pueden haber decidido hacer recortes presupuestarios o están en proceso de reestructuración de plantilla y funciones y, de momento, han paralizado el proceso de selección. Por eso, es conveniente llamar pasado un tiempo razonable, para saber si ya han cerrado el proceso (y de paso reiterar nuestro interés).
5. Estás sobrecualificado
Muchas empresas prefieren descartar a candidatos con más cualificación de la requerida para el puesto por cuestiones de presupuesto (el sueldo es más alto) o porque consideran que, en cuanto encuentren una oferta que se adapte más a su perfil, se irán sin más y prefieren un empleado que pueda quedarse más tiempo.
6. No tienes experiencia específica en alguna tarea concreta
Es posible que tengas experiencia en puestos similares, pero no en una tarea concreta que es importante para el trabajo. Muchas veces es en la entrevista donde se dan cuenta de ello.
7. Hablar mal de tu empleo anterior
Aunque tu experiencia en una empresa anterior no fuera del todo positiva, es mejor hacer hincapié en lo que aprendiste. En caso contrario, puedes parecer desleal. Si eres capaz de hablar mal de tu antigua empresa, ¿por qué no lo vas a hacer con la nueva?
8. Otro candidato se ajusta más al puesto
Puedes ser un buen candidato y hacer una buena entrevista, pero quizás hay otro que se ajusta más al puesto. O, simplemente, no están interesados en tu perfil. Lo que te ha podido parecer una entrevista perfecta, puede que no lo haya sido tanto para el reclutador. También sucede que, siendo ambos candidatos igual de buenos, a veces se selecciona a uno en vez de otro por sus habilidades, y no solo por la experiencia y la formación.
En cualquier caso, aunque esta vez no hayas sido elegido, conviene reiterar tu entusiasmo por trabajar en la compañía, y tu disposición a valorar otra oferta dentro de la empresa que se adapte a tu perfil en otro momento. Mientras tanto, ¡sigue buscando una nueva oportunidad de trabajo!