La mejor forma de integrar los conocimientos teóricos adquiridos en cualquier proceso formativo es a través de unas prácticas laborales. Esto cobra todavía más sentido si atendemos a una de las últimas encuestas del Eurobarómetro del Parlamento Europeo. En ellas, se confirma que realizar prácticas es un paso previo fundamental para encontrar el primer empleo. En este artículo analizamos con más detalle estos datos, y hablamos sobre las características de las prácticas laborales en empresas.
Los estudiantes europeos apuestan por las prácticas en empresas
Según una encuesta del Eurobarómetro del Parlamento Europeo, los jóvenes estudiantes europeos están cada vez más interesados en buscar unas prácticas para impulsar su empleabilidad. De hecho, según este estudio, más del 75% de los mismos realizaron prácticas en algún momento e, incluso, para 1 de cada 5 las prácticas fueron su primera experiencia laboral.
Pero quizás lo más importante de este estudio es la contundencia de los datos. Y principalmente lo son cuando se cuestiona la importancia que tuvieron las prácticas para conseguir trabajo. Ni más ni menos que el 68% de los encuestados encontraron trabajo tras un período de prácticas. Además, casi la mitad de ellos (en torno al 40%), fueron contratados por la misma empresa en la que realizaron dichas tareas.
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Los datos, por tanto, no mienten. Y dada la enorme trascendencia que esto tiene cuando de buscar empleo se trata, es lógico que se potencie desde los servicios de orientación laboral de instituciones públicas o privadas.
Los ayuntamientos, las universidades o los centros de formación profesional trabajan la inserción laboral poniendo especial interés en facilitar distintos formatos de prácticas.
Esto, sin duda, redunda en la aparición de oportunidades laborales y amplia poco a poco las probabilidades de encontrar trabajo.
¿Por qué hacer prácticas es importante para encontrar el primer empleo?
Por un lado, y como afirma la inmensa mayoría de las personas encuestadas, unas prácticas laborales suponen una estupenda herramienta con la que poder desarrollar habilidades que aún no están maduras.
A su vez, dada su naturaleza formativa, también nos sirven para conocer con más detalle un determinado sector. El tipo de tareas que se realizan en la empresa, los perfiles profesionales que las llevan a cabo, la formación que se necesita, etc.
Esto nos ayudará a orientar nuestra carrera hacia aquellos puestos que mejor se ajustan a nuestros gustos o nuestro perfil profesional.
Por otro lado, estos períodos nos permiten establecer una serie de vínculos profesionales muy importantes. Hacer networking y ampliar nuestra red de contactos puede resultar fundamental en algún momento de nuestra trayectoria.
Pero, como decíamos, las prácticas laborales son una estupenda forma de conseguir experiencia laboral.
- Por ejemplo, si somos estudiantes o jóvenes sin experiencia, las prácticas se convierten en una fantástica estrategia para combatir el paro juvenil.
- También son importantes si nos encontramos en situación de desempleo de larga duración, ya que pueden ser una vía de acceso a determinados puestos de trabajo.
- Por supuesto, también suponen una oportunidad cuando estamos buscando un cambio de sector.
- Tras realizar una formación de postgrado o un curso de especialización, podrían ser una primera opción para quien opta por buscar trabajo en un ámbito radicalmente distinto.
No obstante, la nueva regulación en torno a las prácticas profesionales, como el llamado Estatuto del Becario, introducirá una serie de cambios que todavía hoy generan cierta incertidumbre entre las partes implicadas.
Habrá que estar atentos a la forma en la que se materializan estas novedades, ya que las prácticas laborales deben seguir siendo una de las principales vías de acceso al mundo laboral.
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