El agotamiento en el trabajo puede ser síntoma de estrés laboral. El primer paso es detectar y evaluar la situación en la que te encuentras, tanto causas como síntomas. Después pon en práctica estos consejos: pide ayuda, apóyate en tu red social, aprende a decir “no” para evitar el exceso de carga laboral, apuesta por lo que puedes controlar, como no tomar café después de las 16h, y realiza micro ejercicios de manera rutinaria si tu jornada es mayormente sentado.
Cómo detectar que has llegado a tu límite
La definición de salud que da la Organización Mundial de la Salud. te da una pista de cómo puedes cuidarla, también respecto al agotamiento en el trabajo. Según la OMS, “La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”. Esto significa que el tiempo que dedicas al trabajo, así como la manera en la que desarrollas tus tareas tienen un impacto directo en tu salud.
Tras la crisis sanitaria de 2020, los casos de estrés laboral y agotamiento asociado al aumento de la carga en el trabajo han crecido de manera preocupante. Saliendo ya de ese contexto de emergencia, ya es hora de volver la mirada hacia prácticas preventivas que eviten que llegues al burn out. Para diagnosticar si estás en esa dirección, puedes hacerte alguna de estas preguntas:
- ¿Te has vuelto cínico o crítico en el trabajo?
- ¿Te falta energía para tener una productividad constante?
- ¿Te resulta difícil concentrarte?
- ¿Tus logros no te dan satisfacción?
- ¿Estás usando la comida o el alcohol para sentirte mejor o simplemente no sentir?
- ¿Han cambiado tus hábitos de sueño?
- ¿Estás preocupado por dolores de cabeza inexplicables, problemas estomacales o intestinales, u otras quejas físicas?
5 consejos para superar el agotamiento en el trabajo
Si has contestado afirmativamente a alguna de esas preguntas o has detectado además otros síntomas como la vulnerabilidad a las enfermedades, trastornos musculoesqueléticos o presión arterial alta, es la hora de tomar medidas. Sigue estos 5 consejos, y avanza hacia la mejora y bienestar laboral:
- Evalúa la situación y habla con tus responsables. Enfrentarse a un conflicto o a una situación que se puede mejorar es señal de un perfil profesional comprometido. Esconder estos síntomas no harán más que agravarlos.
- Busca apoyo también en tu red social: compañeros de trabajo, amistades o familia. Si has dilatado en el tiempo esta decisión, por picos en la productividad por ejemplo, es posible que ya te encuentres en un callejón sin salida. Para salir del laberinto es necesario contar con aliadas y apoyo profesional.
- Micro ejercicios y salidas al aire libre en la jornada laboral. El simple gesto de moverte, estirarte o caminar, activa los músculos, la circulación, y así tu cuerpo segrega dopamina que induce la sensación de bienestar.
- Practica la asertividad. Reduce tu lista de tareas pendientes y aprende a decir “no” ante solicitudes que excedan las expectativas de tu puesto. Piensa que un “no, gracias” puede evitarte a ti y a la empresa una baja larga por depresión o agotamiento excesivo.
- Apuesta por lo que puedes controlar. Los pequeños pasos son muy significativos. Por ejemplo, desconecta las notificaciones, tanto del mail como del móvil mientras que estás concentrado en una tarea. Reduce la ingesta de café a partir de cierta hora. Reserva mínimo 3 horas a la semana para realizar una actividad que disfrutes, con amistades que no esté relacionada en absoluto con el trabajo, para desconectar y recargar las pilas de manera eficaz.