El currículum es, casi siempre, tu única oportunidad de causar una primera gran impresión. Los reclutadores suelen revisarlo en primer lugar, incluso antes que la carta de presentación. Muchas veces les basta una lectura diagonal del CV para desechar candidatos. Por consiguiente, está claro que tu CV debe tener un buen diseño y una redacción cuidada. Más aún: debe resultar un CV inspirador para quien lo tenga delante. Solo así jugarás con ventaja en medio de una avalancha de candidaturas. A continuación te ofrecemos algunos consejos para conseguir que tu CV impresione e inspire.

Huye de lo estándar

En 1984 se publicó Cómo redactar su currículo: la primera guía dedicada exclusivamente a la redacción de CV. Poco después, los CV empezaron a normalizarse debido a que cada vez más hogares contaban con un ordenador personal. Y de aquellos polvos, estos lodos: hoy, casi la totalidad de los CV se basan en plantillas y fórmulas estandarizadas.

El resultado es que elaborar un CV con los requisitos mínimos, “presentable”, supone poco esfuerzo. Siendo así, quizá te preguntes: ¿Merece la pena invertir tiempo en elaborar un CV más creativo o adaptado al puesto solicitado? ¿No han de hablar por sí mismas mi experiencia laboral y mi cualificación?. Al fin y al cabo, ellas son lo importante, no lo ingeniosa o atractiva que sea mi solicitud…

En parte, es cierto. El problema es que la empresa no sabe nada de tus talentos. Y tu CV podría acabar en la papelera, sencillamente porque el reclutador interpreta que te falta motivación para el puesto. La clave es que no basta con tener formación y talento, hay que saber venderse, convencer al reclutador de que tiene delante al mejor candidato o candidata del mercado. Y para lograr eso no puedes presentarte como uno de tantos; hay que destacar, impresionar, inspirar.

Imagen sobre empleadores que reciben un CV inspirador

Consejos para que tu CV inspire

Dependiendo del puesto al que te presentes, para tu CV puede ser buena idea recurrir a formatos inusuales: una presentación de PowerPoint, un blog, un vídeo… Pero incluso si usas el formato convencional (en documento electrónico o en papel) tienes mucho margen para ser creativo e ingenioso. Te recomendamos atender a los siguientes elementos:

  • El diseño. Líneas, patrones, gráficas e iconos, colores llamativos, una tipografía poco frecuente… los elementos disponibles son muy amplios. La única regla es usarlos con mesura y sentido del equilibrio. Da protagonismo a tu nombre con el tamaño y la tipografía. Quizá te hayas percatado de que muchas plantillas de CV modernas juegan con esta idea. Cita el nombre del puesto, por ejemplo bajo tu nombre: denota profesionalidad y especialización.
  • Empieza con una cita o unas frases sobre ti. ¿Conoces la famosa técnica del elevator pitch? Imagina que tienes que presentarte ante un posible inversor o cliente en lo que dura un viaje en ascensor. Pregúntate: ¿Qué me hace destacar de entre todos los demás candidatos? ¿En qué soy especialmente bueno? Un punto de humor puede hacer diana.
  • Concéntrate siempre en tus puntos fuertes y en tus logros. Selecciona y destaca las cosas que te hacen sentir bien con tu trabajo. Eso puede incluir tareas no remuneradas, como voluntariado o acciones que han permitido a los demás alcanzar sus metas. Lo que es importante para ti probablemente también lo sea para los reclutadores. Y sin duda les resultará inspirador.