Ya sea por adversidades que afectan al panorama general, como la reciente pandemia, como por las que inciden sobre un sector o actividad, o las circunstancias personales de cada cual, que te echen del trabajo en un mal momento siempre es más difícil de superar. Tener herramientas para afrontar un despido en época de crisis te ayudará a superar esta situación complicada.

Aprovechar el crecimiento de la formación online

La formación on line ya estaba muy desarrollada antes de la pandemia. Pero el confinamiento y las medidas de restricción hicieron que emergieran cantidad de actividades formativas más. Durante la fase e menos contacto, se hizo un gran esfuerzo para traspasar toda la parte práctica y presencial de las clases a una modalidad en línea.  Todo ello ha redundado en que se han mejorado las formas de transmisión de conocimiento a través de las tecnologías.

La consecuencia de este aumento de la formación online ha sido el abaratamiento de los costes en formación, la accesibilidad y flexibilidad horaria. Y estas son circunstancia de las que te puedes beneficiar en tu situación. Si te encuentras en crisis por las razones que sean, quizá puedas plantearte un cambio de rumbo. Y adquirir nuevos conocimientos es fundamental para fortalecer ese giro.

Plan de acción para afrontar un despido en época de crisis

Determinar un plan de acción que te guíe con una serie de pasos definidos va a aportarte un gran beneficio porque vas a ser capaz de conseguir mejores resultados que si no lo hicieras. Pero no solo eso, hacerlo también te proporcionará la sensación de que retomas en cierto modo el control de una situación que te ha sobrevenido. Esto es importante a la hora de asumir el impacto emocional y tratar de manejarlo.

Te proponemos una guía para combatir el despido en tres fases, que puedes ir adaptando, añadiendo puntos o redefiniendo algunos en función de tus circunstancias e intereses.

Empleada que recibe una carta de despido

Empleada que recibe una carta de despido

1. ¿Cuál va a ser tu sustento?

Evidentemente, este es un punto fundamental. Así pues la primera fase puede consistir en activar tu faceta más administrativa y revisar papeleo y ayudas. Primero, comprobando los últimos coletazos de tu relación con la empresa: finiquito, liquidación y causas de despido. Después, toca el turno a las ayudas y subvenciones. Algunas de las más nombradas son el ingreso mínimo vital, la ampliación de la protección por desempleo o la protección a personas en situación de vulnerabilidad. También puede haber otras asistencias que gestionen los organismos de tu comunidad autónoma o localidad.

2. ¿Qué puedes ofrecer como profesional?

Toca hacer una reflexión para orientar tu búsqueda de empleo y reflejarla en tu perfil. Piensa en los beneficios de hacer ampliar tu red de contactos, en cualquier caso, pon al día tu candidatura. Repasa toda tu vida profesional y extrae lo más significativo y que creas que habla de tu forma de hacer las cosas, no solo de tu profesión. Con esta información, elabora tu CV.

3. Mueve tu candidatura

Retoma contactos que creas que te pueden conectar con oportunidades de trabajo e incluye tu CV en varios portales de empleo, en Infoempleo tenemos más de 10.000 ofertas a tu disposición. Actualiza tu perfil en las redes sociales, especialmente las orientadas al mundo laboral, y repasa las webs y perfiles sociales de las empresas que te interesan. También ampliarás tu red en actividades formativas y en encuentros de profesionales.

Si consigues dividir estas tres fases en pequeñas tareas que vayas cumpliendo día a día, siempre tendrás una ocupación, lo que probablemente apaciguará tu angustia. Poco a poco irás viendo los frutos y estarás aumentando exponencialmente las posibilidades de encontrar un empleo acorde a tus necesidades en menos tiempo de lo que esperas.