Conocer las características que definen a los buenos compañeros puede ser el comienzo para revertir la situación si se está inmerso en una mal ambiente de trabajo. Sigue el imperativo categórico de Kant: “no hagas a los demás lo que no te gustaría que te hiciera a ti”. Cinco cualidades para ser un buen compañero de trabajo son: la humildad, la capacidad de diálogo, la comunicación no violenta, la seriedad y la cooperación.
La importancia de estas cualidades para ser un buen compañero de trabajo
Ojalá fuera tan sencillo como proponía el bueno de Kant con su imperativo categórico, que mencionamos unas líneas más arriba. Aunque sigue siendo válido para muchos contextos, incluido el laboral, es necesario precisar cuáles son las cualidades para ser un buen compañero de trabajo. Aquí tiene 5 must para ser el compañero que te gustaría encontrar:
- Dialoga: la mayoría de los conflictos laborales nacen de malentendidos. Reconocerás en ti el miedo al conflicto, es decir, a expresar una idea o señalar un hecho que pueda derivar en una discusión. Sin embargo, es recomendable percibir los problemas como nudos que se hacen en los hilos de las relaciones humanas. El silencio los aprieta aumentando la tensión de cada polo. Pero al hablarlo, en la mayoría de las ocasiones, se aclara.
- Sé humilde: para que el primer consejo funcione es necesario saber que todas las personas cometen errores. Tú también. Y está bien. Es humano. Tan solo hay que estar a la altura en los conflictos. Asegúrate de contemplar tus propios fallos antes de mantener una actitud de queja o que señale en exceso los errores de los demás.
- Practica la comunicación no violenta: ser un buen compañero es entender que toda la plantilla está en el mismo barco y quiere llegar al mismo puerto. Además, todo ser humano tiene días mejores y días peores. Con estas premisas, hablar desde el yo en lugar de acusar desde el tú asegura un buen clima laboral. Por ejemplo, di “no veo dónde están los folios”, en lugar de: “¿dónde has puesto los folios? Son pequeños detalles, pero recuerda que “en el fondo, es la forma”.
- Coopera, no compitas: el mercado laboral fomenta la carrera hacia metas y puede nublar tu vista. Frente a lo urgente, prioriza lo importante, es decir, las personas. Es lógico y comprensible que, a veces, por la carga, tiendas a resolver “tu metro cuadrado” sin ampliar la vista al paisaje. Pero si pruebas a hacerlo, observarás ensancharse el mundo y crecerás como profesional. Cuando trabajas en equipo, los resultados son increíbles y muy satisfactorios.
- Mantén la seriedad: valora el tiempo de trabajo de tus compañeros como te gusta que valoren el tuyo. Sé puntual, no entretengas en las reuniones virtuales y entrega tu parte de los proyectos en la fecha acordada.
Ventajas del compañerismo
Trabajar en un entorno con buen clima laboral, donde pasas la mayor parte del tiempo, es beneficioso per se. Ya sea en la modalidad presencial, ya sea en remoto. Pero cabe destacar estas ventajas:
- Ayudará a que seas feliz: la vida es breve y esta debería ser una de las razones para movernos.
- Evita el burn out: los índices de malestar y estrés han aumentado con la pandemia.
- Mejora la creatividad: como decían en La bola de cristal, “si solo no puedes, con amigo sí”. Contar con buenos compañeros ayuda a innovar en la resolución de conflictos y en la forma de realizar las tareas.