A falta de cerrar un acuerdo definitivo entre los agentes sociales y el ministerio implicado, ya que actualmente todavía se encuentra en negociaciones, la prórroga de los ERTE se producirá antes del 31 de mayo. Las empresas podrán acogerse a expedientes temporales de regulación de empleo (ERTE) motivados por la crisis sanitaria del Covid hasta septiembre. Previsiblemente, se ampliará otros cuatro meses esta herramienta que, sin embargo, tiene prevista alguna modificación. Desde el Ministerio de Seguridad Social se ha planteado que el objetivo en esta nueva fase sea fomentar la reanudación de la actividad reforzando las exoneraciones de las cuotas a la Seguridad Social de los empleados que se reincorporen. Por otro lado, propone que vayan a menos las de aquellos que permanecen con el contrato suspendido o reducido. El texto definitivo está por concretar.
Menos de 600.000 personas en ERTE
Será la quinta prórroga de ERTE COVID-19 desde que el 17 de marzo de 2020 el gobierno fijara este mecanismo para tratar de paliar la crisis en el empleo que ha provocado la pandemia. Gracias a los ERTE los trabajadores incluidos pueden seguir vinculados a las empresas recibiendo un 70% de la base de regulación de su salario y las empresas ven bonificadas las cotizaciones a la seguridad social.
Según los datos ofrecidos por el Ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, recientemente el número de personas que permanecen en ERTE es de menos de 600.000 personas (a fecha 11 de mayo). En los momentos más críticos, en abril del año pasado, llegó a haber más de tres millones y medio de trabajadores acogidos a un ERTE.
En octubre se añadieron nuevas causas para que las empresas se acogieran a ERTE debido a las restricciones a la actividad que han marcado desde las diferentes administraciones con el objetivo de contener los contagios. Se establecieron entonces los de impedimento de la actividad, la limitación de la actividad, los sectores especialmente afectados y aquellas empresas que forman parte de lo que se llama cadena de valor, es decir, aquellos cuya supervivencia depende en gran medida de estos sectores, aunque no pertenezcan a ellos. Para cada caso se estableció un porcentaje diferentes de exoneración de cuotas a la tesorería.
La prohibición de despedir seguirá vigente
Entre las modificaciones que se hagan para esta nueva ampliación permanecerá, según aseguró la Ministra de Trabajo, la prohibición de despedir en los seis meses posteriores a la reincorporación a la actividad. En caso contrario, la empresa deberá “reintegrar la totalidad del importe de las cotizaciones de cuyo pago resultaron exoneradas”, tal y como explica la ley.
Otra de las cuestiones que quedan por definir de cara a esta nueva prórroga es la situación de las personas con contratos fijos-discontinuos. En octubre del pasado año se definieron medidas específicas para este tipo de contratos para que pudieran acogerse también a ayudas hasta finales de año. Muchos de ellos relacionadas con el sector turístico, deberían incorporarse durante este periodo por lo que se ve necesario definir una nueva regulación para esta campaña estival en el que la actividad todavía está lejos de recuperación total.
Nuevos ERTE
Por otro lado, entre la documentación que presentó el Gobierno para la concesión de los Fondos de Recuperación Europeos se contempla una propuesta de nuevos ERTE. Un mecanismo que permitirá a las empresas recurrir con mayor facilidad a estas regulaciones de empleo, por ejemplo, aplicando una reducción de jornada o la suspensión temporal en momentos de caída de la actividad con el fin de minimizar los despidos. Está previsto que para finales de año vea la luz.