Trabajar desde casa no es un paquete cerrado que te incluya siempre las mismas ventajas e inconvenientes. No es lo mismo trabajar por cuenta propia que hacerlo de manera asalariada. Sin embargo, todos los tipos de teletrabajo tienen una serie de atractivos y desventajas comunes que te exponemos en este artículo. Además, te proporcionamos tres claves para hacer frente a las adversidades.

Desde el comienzo de la pandemia, se han multiplicado de manera extraordinaria las empresas que han incluido el teletrabajo como una práctica habitual. Aunque todavía son muchas las que se resisten a incorporar esta modalidad. Una opción por la que se han decantado algunas compañías es ofrecer una jornada mixta, con posibilidad de trabajar en remoto y presencial.

Ventajas de trabajar desde casa

Una de las mayores ventajas que ha traído el teletrabajo es no depender de esas jornadas que se alargaban inútilmente en el día. Todavía hoy hay quien hace una pausa para la comida de hasta dos y tres horas, está demasiado lejos como para volver a comer y llega a pasar fuera de su hogar de 10 a 12 horas. Trabajar desde casa siempre permite compatibilizar horarios con otro tipo de obligaciones, como el cuidado de menores y personas dependientes.

Las empresas que han optado por el trabajo en remoto han podido comprobar que la productividad no tiene por qué descender. Algo que tú seguro que ya sabías. Y si has teletrabajado apreciarás la autonomía que te permite el gestionar el reparto de tareas a lo largo de la jornada. No encuentras malas caras si te pones a escuchar tu música favorita, si tienes que hacer una llamada personal o si quieres parar un momento a fumarte tranquilamente un cigarro.

Si en tu centro de trabajo te rodeaba un mal ambiente, trabajar desde tu casa te habrá proporcionado una inmensa paz. Sufrir cada día un ambiente de tensión termina causando problemas en tu integridad física y mental.

Ventajas de trabajar desde casa

Desventajas de teletrabajar

Trabajar desde casa no es para personas a las que les gusta estar siempre acompañadas. Puedes llegar a sentir una incómoda soledad si no tienes costumbre de estar contigo mismo. La falta de compañeros es una de las desventajas que han dejado mella durante esta pandemia. Hasta el punto de que ha sido considerado como uno de los riesgos laborales que la empresa debe contemplar.

Por otro lado, puede pasarte que el trabajo invada tu vida personal. Cuando te sometes a un horario demasiado flexible, es difícil establecer una línea clara que determine cuándo estás trabajando y cuándo paras. A menudo te ves haciendo una tarea doméstica mientras resuelves mentalmente una actividad laboral.

Y al contrario, la vida privada puede impactar en tu trabajo hasta el punto de dificultarte enormemente el cumplimiento de objetivos. Las personas que te rodean no siempre son conscientes de que estás en tu horario laboral.

Consejos para compatibilizar un trabajo flexible desde casa

Una de las habilidades que vas a necesitar adquirir o reforzar es la capacidad de autoorganizarte. Para ello puedes encontrar aplicaciones que te pueden ayudar a medir tiempos y tareas, así como a calendarizar objetivos y programar pausas. Es fundamental que adquieras todas las habilidades digitales necesarias para vivir en esta época, este será tu salvavidas en el panorama laboral de un futuro próximo.

Saber poner barreras entre tu vida personal y la laboral es una actitud de gran provecho para tu salud mental. Es necesario establecer límites con tus familiares y amistades, así como contigo mismo. En tu interior tienes que tener claro cuándo estás trabajando y cuándo descansando u ocupándote de otro tipo de obligaciones.

En cualquier caso, si no quieres reducir demasiado tu círculo social, trata que tus amistades no estén relacionadas solo con tu trabajo. Cuida las relaciones que mantienes fuera de este ámbito para poder escapar realmente de él cuando decidas tomarte un tiempo de ocio.