Él currículum debe ir presentado por un párrafo que te defina y que hable de tus aspiraciones profesionales. Te contamos cómo puedes hacerlo atractivo para que quienes reclutan sientan interés en seguir leyendo. Ese es el propósito de una bio profesional.
Los reclutadores están acostumbrados a ver CV de todo tipo y pueden extraer en poco tiempo la información que están buscando. Sin embargo, si comienzas el documento incluyendo una bio profesional, vas a conseguir dirigir su mirada hacia los aspectos que creas que más les van a convencer. Si les interesa, seguirán profundizando en tu perfil y habrás conseguido salvar la primera barrera.
Te ofrecemos cinco tips para redactar este apartado con eficiencia y creatividad.
Definir una protoprofesión
Por protoprofesión entendemos la madre de todas las profesiones que puedes desempeñar; definir en una o dos palabras qué actividad haces que interese a la sociedad. Quizá no eres programadora, sino alquimista de códigos, o puede que no seas maquetador de libros, sino arquitecto de páginas. Son definiciones no tan cerradas que evocan toda una familia de profesiones que puedes desempeñar. En el caso de que tu perfil solo corresponda a una profesión, esta forma sugerente de presentarte resultará mucho más atractiva. Ahora bien, nombra a continuación la profesión principal a la que aspiras para aclarar cualquier confusión, pero sin cerrar la vía a otras profesiones emparentadas.
Habilidades, gustos o intereses: qué te hace diferente
Escoge dos o tres de tus soft skills e intégralas en la bio dentro de una frase en la que inicies la presentación de tu desempeño, de tu valía como profesional. Puedes relacionarlas con alguno de tus intereses o gustos fuera del ámbito laboral. Dará mucha calidez y cercanía al texto y esta es una buena técnica para establecer conexión con quien te lee. Es como si le contaras una historia con sentido, y esto consigue llamar la atención.
Escoger las palabras clave más adecuadas
Es importante que escojas de manera estratégica cada palabra de este pequeño texto (trata de que la bio no sea superior a 150 palabras). Las palabras clave son aquellas que te proporcionarán un posicionamiento digital (SEO) en los perfiles que hayas subido a la Red, pero es que, además, también otorgan un posicionamiento entre los resultados de las búsquedas de quienes están reclutando perfiles. Basándonos en los dos consejos anteriores, las palabras clave serían la profesión concreta que hayas incluido y las soft skills. Si te presentas a una oferta, trata de que esas palabras coincidan con las que se expresan en el texto de la oferta. Mejorarás tus opciones si siempre envías currículos adaptados a cada oferta que te presentes.
Mejorar la redacción del texto
Para que realmente la bio profesional suponga un gancho, conviene que esté redactada lo mejor posible. La primera quizá te cueste un grandísimo esfuerzo porque no tengas costumbre de escribir o porque consideres que no es tu fuerte precisamente. Este esfuerzo merecerá la pena porque después puedes emplear la misma bio para otro tipo de candidaturas que envíes, adaptando siempre las palabras clave. No descartes pedir ayuda a tu entorno, pero sin claudicar en los consejos que aquí mencionamos (sobre todo en cuanto a extensión y palabras clave). Busca el sentido a todo el conjunto a través del tono o del lenguaje que elijas.
Adaptar la bio a cada medio
Piensa en que el texto que redactes en primer término conviene que lo adaptes a cada oferta que te presentes. Pero también es muy recomendable, y a veces inevitable, que lo hagas a la plataforma donde se vaya a publicar. Podrías usarlo para tus perfiles sociales laborales y estos suelen tener un límite de extensión. También puede que te convenga adaptar las palabras clave al medio, así como el tono que hayas empleado. No es lo mismo escribir para Twitter que hacerlo para LinkedIn o para un portal de búsqueda de empleo.
Empleos que te pueden interesar
Entradas relacionadas
¡Encuentra formación a tu medida!
Sigue a Infoempleo