Gran parte de los estudiantes que se decide a cursar un grado lo hace para ampliar sus conocimientos en un ámbito que le gusta o bien porque piensa que multiplicará las posibilidades de conseguir un empleo adecuado a sus expectativas. No se equivocan, el porcentaje de ofertas de empleo dirigidas a titulados universitarios es el más alto. Pero ¿qué esperan encontrar los estudiantes y cómo evalúan su paso por la universidad?

El informe Los estudiantes ante el mercado laboral, elaborado por la consultora KPMG, revela los puntos más importantes sobre lo que los universitarios opinan de la universidad y la incorporación al mercado laboral. Las conclusiones se derivan de una encuesta realizada a más de 100 estudiantes de universidades españolas y 30 entrevistas personales, en las que se detallan más aspectos.

¿Se adquieren suficientes conocimientos en la universidad?

Ante la pregunta de si los universitarios están contentos con los años que han dedicado a este nivel formativo, es decir, si se ha cumplido lo que esperaban en cuanto a nivel de conocimiento adquirido, la respuesta es sí. Más de tres cuartas partes de los encuestados mantiene esta opinión.

Los peros empiezan en cuanto se les pregunta acerca de si creen que esta formación tiene que ver con el mundo laboral al que deben incorporarse cuando terminen. Más del 40% opina que se ajusta solo un poco, y la razón principal que argumentan es que faltan conocimientos prácticos.

Le dan mucho valor a la formación práctica, y creen que es un aspecto que debería mejorar la universidad. Otros factores en los que opinan que habría que poner atención es en que las enseñanzas se orienten a la realidad del entorno, es decir, que se actualicen, y también que el profesorado posea experiencia laboral reciente.

Uno de los estudiantes encuestado expresa esta necesidad de introducir la experiencia en la formación académica: “La carrera te ayuda a conseguir unas bases para enfrentarte al mercado laboral y a asimilar la información concreta que te trasladan las empresas una vez comienzas a trabajar”.

Planes al terminar la carrera

Casi tres cuartas partes de los estudiantes quiere incorporarse al mercado laboral en cuanto termine su carrera. Tan solo el 20% tiene previsto cursar un máster o un posgrado.

Más del 80% de los encuestados está dispuesto a cambiar de ciudad si el trabajo lo requiere; sin embargo, la mayoría (casi el 60%) prefiere quedarse en España. Uno de cada cuatro se plantean desarrollar su carrera profesional en el extranjero, preferiblemente en países de habla inglesa. El 14% de los encuestados se iría a Reino Unido y el 10% a Estados Unidos.

Expectativas laborales

La idea que los estudiantes se forman sobre sus primeras experiencias laborales no es muy alentadora. Casi la mitad de los encuestados espera ganar entre 15.000 y 20.000 euros, y un porcentaje muy elevado (casi el 20%) opina que su sueldo no llegará a 15.000 euros.

Pero el salario no es lo que más valoran a la hora de entrar en una empresa. Hay otros aspectos que están muy por delante, como las posibilidades de desarrollo profesional, de impulsar su carrera, o la oportunidad de recibir formación continua y de encontrarse en un buen ambiente laboral.

Las nuevas generaciones quieren trabajar y piensan que tienen mucho que aportar. La gran mayoría está convencida de que otras generaciones podrían aprender de sus conocimientos. Principalmente, en lo que respecta al trabajo en equipo y en la actualización de habilidades tecnológicas. Y es que, tal como señala Segor Teclesmayer, socio responsable de People de KPMG, «no solo los jóvenes pueden aprender de sus mayores, sino que estos podrían contribuir al desarrollo de los más veteranos ayudándolos a avanzar en algunas habilidades».