Los salarios poco atractivos y estancados y la inestabilidad en el empleo en la empresa privada junto a una histórica oferta de empleo público han provocado un aumento considerable de personas que se lanzan a opositar. Saben que serán unos meses, puede que unos pocos años, de sacrificio estudiando leyes y teniendo poca vida social, pero para un futuro no muy lejano esperan tener un salario aceptable y, sobre todo, estabilidad.

Razones para opositar: estabilidad y compatibilizar con otras facetas de la vida

Las circunstancias hacen muy interesante el empleo público en todos los niveles de la administración según valoran las academias que se dedican a preparar oposiciones. En los próximos diez años está previsto que se jubilen hasta un millón de funcionarios lo que está impulsando convocatorias masivas de oposiciones.

Las ventajas que encuentran la mayoría para embarcarse en una oposición son un salario bastante equiparado con los que se pagan en la empresa privada, una estabilidad que permiten abordar otros proyectos personales y horarios y beneficios que facilitan una buena conciliación. Por supuesto, no faltan aquellos que tienen voluntad de servicio público.

Las personas que se encuentran en una edad complicada para conseguir un trabajo también engrosan las filas para opositar. Se trata de una buena oportunidad porque se puede acceder a un puesto en igualdad de condiciones y la edad no supone un factor discriminatorio.

 

Preparar una oposición con recursos escasos: doble esfuerzo

Afrontar unas oposiciones requiere de una dedicación casi en exclusiva. Jornadas de entre seis y ocho horas estudiando, algo que algunos prefieren antes que dedicarlas a buscar un trabajo con peores condiciones en la empresa privada. Pero no todo el mundo cuenta con los apoyos necesarios para hacer una preparación adecuada. Muchos se la juegan combinando sus trabajos con el estudio del temario. Arrancando horas al ocio o a su cuidado, posponiendo su independencia o volviendo a casa.

Gran parte de los opositores recurren a la ayuda de preparadores pero hay quienes no pueden hacer frente al pago de una academia para ello. Este tipo de opositor es el que accede a convocatorias menos exigentes con temarios más reducidos, como por ejemplo al cuerpo de auxiliares administrativos.

Para estos casos es interesante valorar aquellas convocatorias que ofrecen una bolsa de trabajo si se obtiene una puntuación mínima. Estas son interesantes para las personas que no pueden jugársela a todo o nada. El empleo no es fijo y está pensado para la sustitución del personal funcionario. Es una forma que sumar puntos para convocatorias posteriores y permite posponer la preparación de un examen que de acceso a una plaza definitiva dentro de la administración.

Otros organismos que ofrecen empleo estable

Pero no solo se pueden preparar oposiciones para la administración. Servicios como Correos o ADIF están lanzando ofertas de empleo con un número de plazas muy atractivo para titulados en FP. En concreto se trata de 1465 plazas para personal operativo. El plazo para la presentación de solicitudes finalizará quince días hábiles contados a partir del día siguiente al de la fecha de publicación del anuncio de la convocatoria que se produjo el día 16/06/2021.

Algunos consejos para opositar

Haz una buena (y realista) planificación del tiempo y del temario. Contando con los momentos necesarios de descanso.

Entrena también la parte psicotécnica. Muchas veces es eliminatoria y no servirá de nada haber estudiado si no la superas. La mejor manera es haciendo test, todos los que caigan en tus manos. De esta manera identificarás rápidamente las posibles trampas que se plantean en los exámenes.

Será fundamental gestionar tus emociones para no llegar a obsesionarte o que aparezcan pensamientos derrotistas.

Permanece bien informado de lo que compete a tu oposición. Las redes sociales y foros de internet te pueden ayudar a ello. Ponte un «favorito» en la barra de herramientas de tu buscador con la convocatoria o créate una alarma por si surgieran novedades.