El objetivo principal de la Estrategia Europea de Empleo, que actualiza la de 1997, es crear más y mejores puestos de trabajo, a través de la cooperación y coordinación entre los Estados miembros. Los ejes fundamentales son la ecología, la transformación digital y la empleabilidad de la población más joven. La propuesta metodológica se apoya en el benchlearning, es decir, en dinámicas de aprendizaje mutuo y localización de buenas prácticas.

Nueva estrategia europea de empleo

Tras la pandemia el foco de la estrategia está puesto en reducir el impacto en la creación de empleo, en coordinar los esfuerzos hacia una economía verde y sostenible, y en promover la empleabilidad de la población joven. El desarrollo de esta nueva estrategia se organiza en cuatro fases:

  • Orientaciones para las políticas de empleo con la puesta en común de objetivos y prioridades entre la Comisión Europea y los Gobiernos nacionales.
  • Informe Conjunto sobre el Empleo que analiza la situación del mercado laboral, la aplicaciones de las orientaciones y evalúa los indicadores sociales y de trabajo.
  • Programas Nacionales de Reforma que deben adecuarse al programa Europa 2020.
  • Informe de evaluación de las políticas laborales de los Estados miembros con recomendaciones específicas para cada país.

Nueva estrategia europea de empleo

La metodología destacada es el benchlearning que combina el benchmarketing con el aprendizaje mutuo. El objetivo es compartir información y experiencias para implementar en sus respectivos estados miembros. La idea es que si alguno de los estados lo está haciendo mejor que el tuyo, entonces ese es el paradigma que se debe adoptar. Con estas pedagogías se crean conexiones sistemáticas e integradas de comparaciones de rendimiento, identificando las buenas prácticas. Ellas sentarán las bases de las reformas estructurales.

¿Qué es la Red Europea de Servicios Públicos de Empleo?

Esta Red, formada por los 27 Estados miembros de la UE, así como Noruega, Islandia, Liechtenstein y la Comisión Europea, surge en 2014 como respuesta a la necesidad de coordinar mejor los esfuerzos realizados por parte de los Servicios Públicos de Empleo (SPE) de los Estados Miembros de la UE. Su origen se encuentra en 1997 cuando se constituyó un grupo asesor informal con un esperanzador nombre (HoPES) que promovió la cooperación, el aprendizaje mutuo y el intercambio.

En la época de la transformación digital y el trabajo nómada, generar políticas de cooperación con una misión proactiva para coordinar las acciones de mejora de los mercados laborales, es fundamental y muy necesario. En concreto, la Red Europea de SPE trabaja para:

  • Aumentar la capacidad de mejorar el mercado laboral
  • Impulsar la demanda laboral, también con el fomento de la movilidad voluntaria.
  • Usar la información compartida para anticipar demandas
  • Preparación de la fuerza laboral para la participación activa en el mercado.

En conclusión, tanto la Red como la Estrategia se orientan hacia el trabajo conjunto para la mejora de los mercados laborales. Lo que contribuye a la legitimación de las reformas adoptadas. Esta ha sido otra de las enseñanzas destacadas tras la pandemia: el progreso de los Estados miembros y sus economías es interdependiente, de tal forma que trabajar de manera conjunta beneficia a todos los trabajadores.