Los seleccionadores son gente normal y corriente que tiene prejuicios como cualquiera. Quizá eres un gran profesional, pero si no cuidas la imagen que proyectas, puede que te cueste mucho más conseguir el empleo que estás buscando. Te ofrecemos algunos consejos que te ayudarán a mejorar tu imagen personal sin perder tu esencia.

Como proyectar una buena imagen personal

Lo que cada cual lleva puesto no es más que un reflejo de la personalidad. Sin embargo, hay que ir con cautela con esta afirmación. No hay que dejarse llevar por ideas preconcebidas sobre lo que otros opinarán de nosotros por nuestra forma de vestir. Este tipo de pensamiento hará que adoptes estéticas que desentonan contigo, y eso va en contra de la propia imagen. Hay algo que se percibe como falso.

Si eres alguien a quien le gusta vestir ropa cómoda, para una entrevista de trabajo no te plantes un pantalón o una falda que te aprieta, o una corbata si te agobia el calor, o unos tacones si tú eres más de zapato plano… Lo realmente importante es que tu aspecto se vea cuidado.

Esto quiere decir que repases tus prendas por si tienen manchas, están descosidas, tienen algún roto o se ven demasiado desgastadas. Tampoco suele verse con buenos ojos que la ropa esté muy arrugada. En cuanto al estilo, cada cual tiene el suyo, pero lo cierto es que, sobre todo cuando acudes a una entrevista o estás en el periodo de prueba, trata de no destacar por tu aspecto, intenta llevar una indumentaria que pase lo más desapercibida posible. Un consejo que no suele fallar: viste con algo que no te disguste a ti y que aprobarían el 80% de tus amistades y tu familia.

Nos hemos centrado demasiado en el aspecto exterior, pero hay algo fundamental que también influye en tu imagen personal: tu actitud. Siempre que muestres educación, estarás sumando puntos positivos a tu apariencia. Ser comedido y prudente son cualidades que te ayudarán a que los demás se lleven una buena primera impresión de ti.

La importancia de la imagen personal y el aseo en el trabajo

Lo que NO beneficia a tu imagen personal en el trabajo

  • Higiene descuidada. La higiene va más allá de una cuestión personal. Puede considerarse un acto social. Quienes descuidan su limpieza personal a menudo son señalados por el grupo con el que se relacionan. No tiene que ver con un olor corporal fuerte, eso es algo que no se puede evitar, sino con llevar una higiene diaria del cuerpo y de la vestimenta.
  • Indumentaria que está fuera de lugar. Si tienes una forma peculiar de vestir, quizá puedas mostrar más adelante tu personalidad. Sin embargo, en los primeros contactos, tanto en una entrevista personal como en el periodo de prueba, contente un poco. Sobre todo, trata de que tu estilo pase desapercibido, al menos al principio.
  • La comunicación no verbal también habla de ti. Adoptar posturas que denoten pasotismo, dar contestaciones fuera de tono o emplear expresiones demasiado vulgares no van a ayudarte a conseguir un trabajo.