Quizá te hayas planteado la posibilidad de cambiar de sector profesional y buscar nuevos horizontes. Quizá sientes que los vientos de la innovación soplan en otras direcciones, o simplemente te has cansado de hacer siempre lo mismo. En cualquier caso, atiende a estos consejos si quieres completar con éxito tu reinvención profesional.

Las razones para cambiar de sector profesional

Hace tiempo que pasaron los tiempos en los que un joven aprendía duramente el oficio que desempeñaría durante el resto de su vida. El mercado laboral ha cambiado radicalmente y lo que ha perdido en seguridad lo ha ganado en apertura de oportunidades y en dinamismo.

Por ello, es frecuente que muchos trabajadores se vean enfrentados, en algún momento de su vida profesional, a la posibilidad de realizar una transición en su carrera. Los motivos más habituales suelen ser:

  • La búsqueda de mejores condiciones laborales. La profesión que hace diez años era prometedora puede haber entrado en declive antes nuevas tendencias en el mercado. O quizá la introducción de tecnologías innovadoras la ha hecho menos rentable.
  • Las falsas vocaciones laborales, introducidas por tradiciones familiares o modas pasajeras.
  • La búsqueda de la estabilidad personal y la conciliación laboral. Por muy satisfactoria que sea tu profesión de toda la vida, si te obliga a continuos desplazamientos o jornadas rotatorias, es normal que busques otros ecosistemas laborales más estables a partir de determinada edad.
  • La capacitación cruzada o cross-training, una práctica que siguen cada vez más empresas. El objetivo es formar talentos capaces de desempeñarse en diferentes áreas. Por ello, es probable que tu organización desee que amplíes tu experiencia.

Sea cual sea la idea que impulse tu necesidad de cambio, no dejes que te lleve la corriente ni dejes nada al azar. Ya que te juegas tu futuro, hazlo sobre bases seguras.

 

Sé realista y autoevalúate

Salvo que tu empresa quiera relocalizarte para ampliar tus competencias, tal y como se ha visto anteriormente, partes de un impulso personal de cambio. Y ese impulso es creativo, pero debes asegurarte de que estás preparado para dar el salto.

Por lo tanto, lo mejor es que comiences identificando tus fortalezas y debilidades de la forma más desapasionada posible. ¿Encajan tus aspiraciones personales con el nuevo sector del mercado que has elegido? ¿Están de acuerdo con ello tus valores? Se trata de preguntas que debes hacerte y responderte con sinceridad.

Investiga e infórmate

No te dejes llevar por impresiones personales o por lo que leíste en algún artículo profesional. Haz una investigación profunda sobre el nuevo sector profesional al que quieres dirigirte: cuáles són sus perspectivas de futuro, la formación necesaria, tu tasa de desempleo, sus dinámicas en el mercado… De esta forma serás capaz de realizar una decisión consciente de la que difícilmente te arrepentirás.

Diversifica tus habilidades y amplía tu formación

En consonancia con lo que has aprendido en el primer punto y lo que esperas encontrar en el nuevo sector, tendrás muy claro el escalón que te separa de tu puesto profesional deseado. Para ello, trabaja activamente en las habilidades blandas que necesitarás, pero piensa también en los conocimientos técnicos que necesitas. No descartes ninguna acción de formación.

Trabaja tu red de contactos

Seguramente es lo mismo que hiciste para llegar al puesto en el que te encuentras ahora mismo y ya sabes de qué se trata. Informa a tus contactos personales y profesionales de tus intenciones, acude a ferias del sector, ensaya su elevator pitch y sé activo en las redes sociales profesionales.

Adapta tu candidatura y cambia de sector profesional

Ahora sí que puedes olvidar tu viejo currículum vitae, porque te espera una nueva vida profesional. Tienes que rehacerlo de nuevo, bajo nuevos parámetros. Escribe una nueva carta de presentación. Sería buena idea que hables para ello con personas que ya trabajen en tu sector de destino, te aportarán una visión fresca y experimentada.