Hoy es el Día Internacional de la Felicidad. Hablemos de este estado en el séptimo año que se lleva celebrando su día. La razón por la que se instauró esta efemérides fue para recordar anualmente a los Gobiernos que incluyan medidas para que su ciudadanía tenga mayor bienestar y, en definitiva, sea más feliz. Pero ¿qué podemos hacer cada uno de nosotros por aumentar este bienestar? Te damos algunas claves para ser más feliz en el trabajo.
Cómo estar a gusto en el trabajo
Según la VIII Encuesta Adecco sobre Felicidad en el Trabajo, el 52% de los españoles señala que la felicidad laboral es clave a la hora de elegir un trabajo o empresa. Los factores que más se valoran para conseguirlo son, por orden de importancia, flexibilidad horaria o un buen horario de trabajo, disfrutar de un buen ambiente laboral y contar con una buena jefatura. El salario se sitúa ya en el cuarto puesto en importancia.
Es decir, que si te encuentras bajo mínimos en alguno de estos cuatro factores, es muy probable que te cueste más ser feliz en el trabajo. No te castigues pensando que la felicidad está solo dentro de ti. Ahora bien, se puede tratar de generar resiliencia ante la adversidad, y esto sin duda conllevará mayor bienestar, al menos. Ese bienestar puede llegar a proporcionar un estado de mayor felicidad.
Puedes empezar por intentar negociar algunos aspectos. Gracias a la pandemia de coronavirus, muchas empresas han tenido que poner en práctica el teletrabajo, a pesar de todas las reticencias que tuvieran. ¿Qué tal si propones a tus responsables una forma de fexibilizar tu horario aprovechando esta vía? Con respecto al buen ambiente, está claro que solo puede haberlo si todo el mundo (o una gran parte) está dispuesto a participar.
Iniciar por tu parte actitudes positivas que fomenten el buen trato puede desencadenar que mejore el ambiente general. Y esto vale también para tratar de cambiar la mala relación con tu jefe o jefa, aunque no depende solo de ti. Pero merece la pena intentarlo para ser más feliz en el trabajo. Por último, puedes animarte a pedir un aumento de salario, siempre que encuentres el momento propicio.
Qué actitudes tóxicas se pueden tratar de evitar
Una de las actitudes más tóxicas que pueden empañar tu bienestar en la empresa es darle vueltas a una situación que tus compañeros y tú consideráis injusta pero contra la que nadie está dispuesto a protestar. Quejarse libera momentáneamente y además es muy necesario para poder visibilizar un problema. Aparte, da la posibilidad de crear lazos para poder actuar en conjunto. Lo tóxico empieza cuando se convierte en una queja recurrente que nunca termina de cuajar en una acción. Si es así, sumergirse en la queja solo os servirá para tenerla cada vez más presente. Llegados a este punto, quizá tomar una decisión sirva para mejorar tu bienestar. Por un lado, puedes actuar frente a esta situación, pero si decides no hacerlo, toma conciencia de qué es lo que te frena y tenlo presente cuando busques desahogarte hablando de ello.
Otra actitud tóxica que puede minar tu sensación de felicidad es que no te autorrealice tu trabajo, que no te motive nada en absoluto. Ten en cuenta que el trabajo es, entre otras cosas, un medio de sustento. Puede que no tengas el puesto que hubieras deseado y quizá un cambio de rumbo sea la solución para salir de este atolladero. Sin embargo, si piensas que esta no es una buena decisión dadas tus circunstancias actuales, puedes tratar de aumentar tu bienestar fuera del trabajo autorrealizándote en otros campos. Por ejemplo, practicando algo que te apasione o realizando una actividad de voluntariado, o dedicándole a tu familia y amistades un tiempo de calidad.
