Si te encuentras empeñado en la difícil tarea de buscar trabajo, las tácticas de la guerrilla laboral pueden resultarte muy útiles. Se trata de un concepto que proviene del mundo del Marketing y que te ayudará a optimizar tus recursos y maximizar tus posibilidades de ser contratado.
Marketing de guerrilla
Acostumbrados a utilizar cada vez más expresiones anglosajonas en nuestro idioma, es poco habitual que una palabra española, como “guerrilla” se internacionalice, y mucho más que nos sea traída de vuelta.
Eso es lo que ocurre con el término marketing de guerrilla, acuñado por Jay Conrad Levinson en el libro del mismo título de 1984. Se trata de un enfoque que ha ido cobrando cada vez mayor protagonismo a medida que se desarrollaba el mercado y el público se ve cada vez más saturado de mensajes publicitarios.
Consiste en un conjunto de estrategias alejadas de la ortodoxia en las que se busca un impacto emocional a través del ingenio y la creatividad. Alejándose de los canales publicitarios convencionales, el departamento de Marketing busca llegar a su público objetivo de forma más directa. Se podría decir que es como buscar un atajo.
Los bajos o nulos costes del marketing de guerrilla o las enormes posibilidades que encierran hacen que este concepto sea muy útil para pequeñas y medianas empresas con escasos recursos presupuestarios.
La guerrilla laboral como estrategia
Precisamente son esas características las que puedes usar tú como demandante de empleo. La guerrilla laboral consiste en tomar este método que usan los expertos en Marketing para buscar captar la atención de las personas concretas que pueden decidir tu contratación o recomendarla.
Si no es la primera vez que buscas trabajo ya sabrás que los departamentos de RRHH suponen una barrera difícil de franquear, ya que mueven cantidades ingentes de currículums entre los cuales es muy fácil que el tuyo pase desapercibido.
Para ello vas a necesitar altas dosis de ingenio y estrategia para actuar fuera de los canales habituales establecidos. Porque de eso es precisamente de lo que se trata.
El primer paso será siempre la investigación. Si tienes claro el rumbo que debe tomar tu carrera profesional, seguramente tienes en mente una o varias empresas como sitios ideales en los que quieres aterrizar.
Lo que primero que vas a hacer es estudiar a fondo esa empresa. Su plantilla, su estructura y su cultura organizacional. Pero, sobre todo, trata de localizar a la persona clave, al jefe de equipo de aquel departamento que te interesa. Aunque no esté al cargo de la contratación en la empresa, su recomendación va a ser siempre escuchada y tenida en cuenta.
Sigue a esa persona en redes sociales y busca cualquier información relevante que puedas usar para conectar con esa. En el plano profesional y en el plano personal.
A partir de ahí, debes trazar un plan y buscar acciones concretas que permitan captar su atención. Quizá tenéis aficiones y hobbies comunes, o habéis viajado a los mismos sitios. Esa conexión personal será la llave que puedas usar. El objetivo es conseguir una cita con esa persona, que es donde te postularás para el puesto.
Las mejores estrategias de guerrilla laboral
Los principios de la guerrilla laboral son la adaptabilidad y la búsqueda de la oportunidad. Por lo tanto, cada caso y cada persona serán muy diferentes. Sin embargo, hay algunas estrategias de probada eficacia que debes tener en cuenta.
Busca una forma de que tu currículum destaque claramente sobre los demás. Más allá de la estructura y el diseño que elijas, ten en cuenta que debe ser novedoso y epatante. Se suele mencionar el video currículum como una posibilidad.
Sé activo en redes sociales, ya que Internet ofrece muchísimas posibilidades para la guerrilla laboral. Y no solo en los portales tradicionales de búsqueda de empleo.
Siempre que te sea posible, no expliques qué sabes hacer y cuáles son tus habilidades. Resulta mucho más eficaz y directo mostrar lo que has hecho. Utilizar la mensajería o el correo postal para enviar un producto de tu trabajo a la persona clave que encontraste puede ser una buena idea.
