Acertar con la medida adecuada no es fácil. Sobre todo, cuando se tiene mucho que decir y hay poco tiempo o espacio en el que explayarse. Por otro lado, es normal que cuando la inseguridad invade se quiera demostrar en exceso. Pero un curriculum tiene que contener lo justo. Los procesos de selección tienen muchas candidaturas y alguien (o quizás un robot) solo tiene la intención de ir al grano. Toca seleccionar del cv lo que más se ajuste a las características del puesto y no abultarlo con información irrelevante. De esta forma, conseguirás destacar con tu cv.
La primera criba en un proceso de selección es donde más curriculum se descartan, así que hay que hacerlo pasar por esa puerta con ligereza. Ante una gestión masiva CV, tanto si es una máquina (ATS, applicant tracking systems o sistemas de seguimiento de candidatos) como si lo hace un ser humano se va a centrar en lo esencial. Comprobará si tu cv encaja con lo que piden. No van a detenerse mucho más. Por eso es imprescindible que lo redactes con palabras claves relacionadas con tu profesión y que seas concreto.
Y tener en cuenta algo fundamental, el cv solo debe tener una página, digamos que es un tráiler en papel de tu vida laboral. Durante la entrevista podrás contar tu película (o parte de ella, al menos)
¿Dónde se nos van de las manos las palabras en un CV?
En un curriculum, donde se quiere resaltar, principalmente, es en la experiencia. Valora si hay demasiadas líneas dedicadas a describir de las funciones que has desempeñado en determinado puesto. Si solo se han realizado durante un corto periodo de tiempo prescinde de ellas.
Lo ideal es resaltar en un par de frases las funciones principales que desempeñaste en cada puesto, el núcleo duro de lo que hacías. En la entrevista tendrás oportunidad de profundizar. La información anodina puede ser molesta para la persona que selecciona con lo que logramos el efecto contrario al que se busca.
Es importante remarcar que la experiencia que no está relacionada con el puesto debes evitarla. Es algo tentador si se está dando un giro profesional hacia otro sector porque la poca experiencia hace sentir un abismo, pero, en realidad, no sirve para ocultar que no tienes demasiada profesión. Sin embargo, esa experiencia, convenientemente traducida, puede ser muy valiosa en el apartado de competencias ya que muchas de las softskills se comparten con otras profesiones.
Indica solo el nivel más alto de formación reglada
No es necesario que pongas el colegio en el que estudiaste si has completado bachiller o un grado de FP. Tampoco si tienes un grado. Indica solamente la formación relacionada y el último curso que hiciste del nivel más alto de estudios que tengas.
En el apartado de competencias y habilidades también puedes reducir palabras. Tienes un amplio abanico de destrezas, pero habla solo de las que sabes que valorarán para el puesto. Por supuesto, también las transversales (softskills).
¿Cómo justificar los periodos sin empleo?
Lamentablemente, la gran mayoría de los curriculum tienen lagunas de inactividad. Hemos atravesado una grave crisis que dejó sin empleo a muchas personas o con muchas dificultades para volver a emplearse tras una finalización de contrato. No es necesario que rellenes este tiempo con actividades que no tienen que ver solo porque no queden huecos. Si has podido formarte durante ese tiempo, te has dedicado a la crianza o has emprendido algo sin mucho éxito tendrás oportunidad de contarlo en la entrevista. Prepárate muy bien ese relato con un buen storytelling.
¿Eres políglota de verdad?
Cada vez más personas en España tienen un buen nivel de inglés que les permite trabajar por escrito en ese idioma y defenderse con solvencia en una reunión. Muchas cuentan con un nivel intermedio, aunque son pocas a las que les sirve para comunicarse en un medio laboral internacional, ya que esto requiere una mayor fluidez. Aún así, en el cv es importante poner el nivel de conocimiento real de este idioma ya que es el más solicitado en las ofertas de empleo.
Sin embargo, saber alguna palabra en otro idioma porque has viajado a ese país unos días o porque diste un curso de otra lengua hace mil años no te hace tener conocimientos básicos de ese idioma. Sobre todo, si no le has dado uso. Evita poner esta información si no forma parte de los requisitos.
La información que aparezca en tu curriculum debe caber en una hoja y conviene que tenga una distribución limpia de cada apartado y del texto, es decir, que no parezca abigarrada. Se debe poder leer claramente. Es preferible invertir tiempo en redactarlo con un tono entusiasta y proactivo que en rebuscar información para rellenar entre las cosillas que has hecho.