Un despido desencadena una serie de trámites a los que es importante poner atención para que el momento, ya de por si desagradable, no se agrave más de lo necesario. Según la ley, si no estás conforme con las razones del despido o con la indemnización recibida, puedes demandar a la empresa. Pero antes de acudir directamente al juzgado, hay un paso obligatorio que debes conocer. Se llama acto de conciliación laboral. Este paso sirve para intentar llegar a un acuerdo con la empresa sin necesidad de juicio. Aquí te explicamos, paso a paso, cómo funciona todo este proceso.
¿Qué es el acto de conciliación laboral?
Si surge un conflicto laboral, la ley exige que trabajador y empresa intenten primero llegar a un acuerdo que evite llegar a los tribunales. El objetivo de este acto de conciliación laboral es facilitar un acuerdo ágil y eficaz que evite procesos judiciales largos, costosos y estresantes, beneficiando a ambas partes.
Los motivos por los que se puede solicitar un acto de conciliación no siempre tienen que ver con el despido. Se pueden reclamar también cantidades que deba la empresa u otras condiciones que el trabajador considere vulneradas.
¿Qué tengo que hacer si me despiden?
El primer paso es presentar un escrito llamado “papeleta de conciliación”. Es un documento en el que explicas por qué reclamas: por ejemplo, porque no estás de acuerdo con el motivo por el que te han despedido, porque no te han pagado el finiquito, porque te deben horas extras…
Este escrito se entrega ante el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC) de tu comunidad autónoma. Lo puedes hacer presencialmente o muchas veces también por internet.
¡IMPORTANTE! Tienes solo 20 días hábiles desde el día siguiente al despido para presentar esta papeleta. Si se te pasa el plazo, puedes perder el derecho a reclamar.
Una vez entregas la papeleta, el SMAC te mandará una citación con fecha, hora y lugar para acudir al acto de conciliación. También citarán a la empresa. Suele tardar unos días, pero si no se celebra en un plazo de unos 15 o 30 días hábiles (depende del caso), se da por cumplido el trámite y ya puedes ir al juzgado.
¿Qué pasa en el acto de conciliación?
Ese día, te reúnes (tú y/o tu abogado) con un representante de la empresa, delante de un funcionario que actúa como mediador, pero no toma decisiones ni impone nada. Solo toma nota del resultado.
En esa reunión, pueden pasar una de estas tres cosas:
✅ Que haya acuerdo (avenencia)
La empresa y tú llegáis a un acuerdo: por ejemplo, te pagan una cantidad y tú aceptas no ir a juicio. En ese caso, se firma un acta que tiene valor legal. Es decir, si la empresa luego no cumple lo acordado, puedes denunciarlo y se ejecuta como si fuera una sentencia de un juez.
❌ Que no haya acuerdo (sin avenencia)
No os ponéis de acuerdo. El funcionario lo anota en el acta, y a partir de ahí ya puedes presentar una demanda en el Juzgado de lo Social. Necesitarás incluir una copia del acta de conciliación para demostrar que intentaste llegar a un acuerdo previamente.
❓ La empresa no se presenta
A veces, la empresa no va a la cita. Eso no impide que tú sigas con el proceso judicial, pero puede jugar en su contra. Incluso pueden llegar a obligarla a pagar las costas del juicio o recibir una sanción si no justifican su ausencia.
¿Y si no hay acuerdo? ¿Qué tengo que hacer?
Si no hay acuerdo o la empresa no acude, toca dar el siguiente paso: ir al juzgado.
- Prepara la demanda: necesitas redactar un escrito (puede hacerlo tu abogado) explicando tu caso, con pruebas, fechas, y lo que reclamas.
- Presenta la demanda en el Juzgado de lo Social: tendrás que adjuntar la copia del acta de conciliación.
- Se fija una fecha para el juicio: en esa vista, tú y la empresa expondréis vuestros argumentos ante el juez. Después, el juez dictará una sentencia.
¿Es obligatorio tener abogado?
Para el acto de conciliación no es obligatorio, pero sí muy recomendable. Un profesional puede ayudarte a redactar bien la papeleta, negociar mejor con la empresa y aconsejarte si debes aceptar una oferta o no.
Para el juicio, tampoco es obligatorio, pero ir sin asesoramiento es muy arriesgado. Por eso, lo más aconsejable es contar con un abogado laboralista desde el principio.
¿Cuánto cuesta todo esto?
El acto de conciliación en el SMAC es gratuito. Si contratas a un abogado, deberás pagar sus honorarios, aunque algunos seguros de hogar o sindicatos cubren este servicio.
Si ganas el juicio, a veces la empresa tiene que pagar parte de tus gastos si no acudió a la conciliación sin justificación.
Y recuerda que conciliación laboral es un paso obligatorio antes de ir a juicio si tienes un conflicto con tu empresa. Aunque al principio puede parecer complicado, con información y ayuda adecuada es un proceso bastante habitual.