El 16 de julio de 1969, el cohete Saturno V, habitado por los astronautas Neil Armstrong, Buzz Aldrin y Michael Collings, fue lanzado como parte de la misión Apolo 11. Cuatro días más tarde, Neil Armstrong se convirtió en la primera persona en pisar la superficie lunar. Este mes se han cumplido cincuenta años de uno de los hitos históricos más famosos del siglo XX.
El 4 de octubre, tras el lanzamiento al espacio del primer satélite terrestre en 1957, se celebra el día internacional del espacio, y es que ¿quién no ha soñado alguna vez con ser astronauta? Hay quienes piensan que esta es una profesión casi inalcanzable. Sin embargo, aunque no sea algo sencillo, con mucho esfuerzo y dedicación es posible que puedas alcanzar este sueño.
Requisitos académicos
Para ser astronauta es necesario contar con un título universitario en una carrera de una duración mínima de cuatro años, que debe estar vinculada a la ingeniería, las matemáticas, la física o la biología.
Además, es fundamental contar con tres años de experiencia en su campo de estudios o, en su defecto, contar con una oposición o un doctorado. También, el perfecto dominio del inglés (tanto hablado como escrito) es un requisito indispensable para acceder a esta profesión.
Cada año, la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Agencia Espacial Estadounidense (NASA) organizan una convocatoria para que los graduados puedan realizar prácticas dentro de su organización y, posteriormente, sean seleccionados para que formen parte de su equipo y lleven a cabo misiones espaciales. También, estos organismos suelen convocar oposiciones para seleccionar a los mejores profesionales dentro de su plantilla.
Otros requisitos
Además de la formación, existe otra serie de requisitos imprescindibles que debes cumplir si quieres acceder a la profesión de astronauta:
Edad: Entre 27 y 37 años.
Altura: Entre 1,57 y 1,90.
Salud: Debido a la exigencia física que requiere esta profesión, la NASA realiza exámenes médicos para comprobar que la visión es de 20/20 sin gafas ni lentillas. Además, la persona debe tener una presión arterial de no más de 14.
El examen físico
Después de superar todos esos requisitos, los candidatos deberán realizar una serie de entrevistas y, una vez superadas, tendrán que realizar un examen físico basado en un entrenamiento militar de supervivencia. Este examen consiste en una serie de pruebas:
- Un examen de natación: 75 metros sin parar de nadar y después repetir el proceso con un traje de astronauta. De esta manera, calculan la diferencia de tiempo en una prueba y otra.
- Patalear en el agua con el traje de astronauta durante 10 minutos.
- Superar diferentes pruebas de presión atmosférica.
- Superar la microgravedad de un vuelo espacial dentro de un jet diseñado específicamente para el examen.
El examen técnico
Una vez superado el examen físico, los candidatos deberán aprobar una serie de pruebas teóricas sobre distintos aspectos como robótica o el funcionamiento de los vehículos espaciales y de los sistemas de la estación espacial internacional.
Si quieres ser astronauta de la NASA, través de su página oficial, ésta anuncia los procesos de selección de los candidatos. Una vez estén abiertos, las postulaciones deben realizarse a través del portal de trabajo del gobierno estadounidense. Si quieres entrar en la ESA, también puedes consultar su página oficial para saber cuándo se hacen los procesos de selección.
Por lo tanto, si crees que eres capaz de superar todas estas pruebas y además cumples con los requisitos físicos, no dudes en seguir adelante y tratar de alcanzar tu sueño.