Encontrarse en situación de desempleo es una circunstancia que afecta de forma negativa en muchos ámbitos de la vida. Sobre todo, en aquellos casos en los que no se puede aplicar a la prestación por desempleo, por no contar con una cotización suficiente. Para proteger adecuadamente a las personas que se encuentren en esta situación, pedir el paro sin haber cotizado puede realizarse mediante el subsidio por desempleo. Un mecanismo de ayudas sociales que permite acceder a una prestación y que, tras la reforma del subsidio por desempleo, presenta unas nuevas características que has de conocer.
Diferencias entre subsidio y prestación por desempleo
En cuestión de asistencia económica en el desempleo, existen dos mecanismos diferenciados que ayudan a asegurar una protección social a los ciudadanos.
La herramienta más conocida es la prestación por desempleo. Un mecanismo de asistencia social que también está pensado para las personas que hayan visto reducida su jornada de trabajo entre un 10 y un 70 por ciento. Dicha ayuda cuenta con el requisito principal de haber cotizado un mínimo de 360 días en los 6 años anteriores a la situación de desempleo. Y la definición de la cuantía se calcula según las bases de cotización realizadas a la Seguridad Social en los últimos 6 meses trabajados.
No obstante, si la persona en cuestión no alcanza este periodo mínimo, también se puede acceder a una prestación por insuficiencia de cotización conocida como subsidio por desempleo.
Para poder pedir el paro sin haber cotizado y acceder al subsidio por desempleo se tienen en cuenta diversos factores. Si la persona afectada cuenta con responsabilidades familiares, el número de meses que ha cotizado (sin alcanzar el mínimo de 360 días en los últimos 6 años) o si se encuentra entre los nuevos beneficiarios actualizados tras la reforma.
Requisitos para pedir el subsidio por desempleo por cotizaciones insuficientes
Si no cuentas con los requisitos mínimos de cotización requeridos para poder acceder a la prestación por desempleo, debes tener en cuenta los criterios mínimos que cumplir para solicitar el subsidio por desempleo:
- Debes estar desempleado o desempleada y en situación legal de desempleo.
- Estar inscrito o inscrita como demandante de empleo y mantener dicha inscripción durante todo el periodo, así como suscribir el acuerdo de actividad.
- Haber cotizado un mínimo de 3 meses en el caso de que cuentes con cargas familiares. Plazo que se amplía a un periodo cotizado de 6 meses en el caso de que no se tengan, siempre y cuando no se alcancen los 360 necesarios para la prestación por desempleo.
- No recibir rentas de cualquier tipo superiores al 75 % del salario mínimo interprofesional (SMI), sin contar la parte proporcional de dos pagas extraordinarias.
La duración de este subsidio dependerá del número de meses que hayas cotizado, así como de las posibles responsabilidades familiares que ostentes. La cuantía se calcula según el 80% del Indicador Público de Rentas de Efectos Múltiples (IPREM) durante el periodo normalizado (aunque aumenta el porcentaje de cálculo tras la reforma) y se divide en tres tramos dependiendo de la duración.
Durante los 6 primeros meses se percibirá el 95% del IPREM, con una cuantía total de 570 euros. Los 6 meses siguientes se calculan en base al 90% (540 euros) y el resto del periodo la fórmula se mantiene en un 80% del indicador (480 euros).
Para poder acceder a esta prestación deberás rellenar el modelo oficial de solicitud, además de la documentación requerida según el caso, en la sede electrónica del SEPE o en las oficinas de prestaciones a través de una cita previa.