El pasado año se redujo un 41,9% la oferta de empleo en nuestro país. La pandemia acabó con siete años continuados de crecimiento del empleo, en los que todavía estábamos saliendo de la anterior crisis económica. Los efectos se hicieron notar con gran virulencia en nuestro mercado de trabajo y miles de personas cerraron sus negocios, fueron despedidas o entraron en ERTEs. Un año después la situación parece más estable, aunque muchos sectores todavía no se han recuperado y más de tres millones y medio de profesionales siguen buscando trabajo.
Esta mañana se ha presentado una nueva edición del Informe Infoempleo Adecco. Este Informe anual ofrece una completa visión de la situación laboral en España a través del análisis de 242.000 ofertas de empleo publicadas en 2020, un año marcado sin duda por la crisis sanitaria y económica que hemos vivido. También recoge las opiniones de más de 10.889 profesionales, autónomos y empresas que sirven para conocer, de primera mano, cuáles son las dificultades actuales y hacía dónde se encamina nuestro mercado laboral. En este post resumimos algunos aspectos que pueden ser de gran importancia para todos aquellos que buscan empleo o piensan dar un nuevo rumbo a su carrera profesional.
¿Qué comunidades generaron más empleo en 2020?
La Comunidad de Madrid se ha mantenido como la principal generadora de empleo a nivel nacional, acaparando el 24% de las ofertas totales. Le sigue Cataluña, que ha pasado del 23% que tenía en 2019 a un 21,2%. Y en tercer lugar se sitúa País Vasco, que reúne el 10,6% del empleo. Estas tres comunidades suponen el 55,9% del total del empleo durante el último año, a pesar de que las tres han visto reducida su oferta en 2020.
Andalucía, que se sitúa en cuarto lugar de la tabla, ha mejorado en más de un punto su participación y consigue hacerse con el 9,8% de la oferta nacional, registrando la mayor subida porcentual en este difícil año marcado por la pandemia. Mientras que la Comunidad Valenciana se mantiene en el quinto puesto con un 6,9% de las ofertas, y Castilla y León repite también en el sexto lugar, pero incrementando su oferta en un 0,93% respecto a 2019.
Asturias, La Rioja y Extremadura, junto a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, son las regiones donde se han generado menos ofertas de empleo.
¿Qué sectores han evolucionado mejor?
A lo largo de 2020, el sector que más ofertas de empleo ha generado en nuestro país ha sido comercio y distribución minorista (9,5%). Este sector está compuesto por todas aquellas empresas que ofrecen productos y servicios a los consumidores para su uso personal. Dentro de este grupo se ubican grandes almacenes, hipermercados y supermercados, servicios esenciales que se han mantenido abiertos. Este sector ha crecido en dos puntos en el último año por el aumento en la demanda de cajeros, mozos, reponedores y personal de primera línea de servicios.
En segundo lugar se ha situado el sector industrial, con un volumen de oferta del 8,2% a nivel nacional, dos puntos y medio más en comparación con 2019. Completa el podio el sector sanitario (7,8%), que ha experimentado un enorme crecimiento (+ 5 p.p) fruto de la necesidad de personal para hacer frente a la situación pandémica que ha azotado al país. Otros sectores que han crecido con el coronavirus han sido enseñanza y formación (5,3%) y transporte de mercancías y logística (5,2%), con subidas de 2,8 y 3,4 puntos porcentuales, respectivamente.
La otra cara de la moneda está en el sector de hostelería y turismo, que ha pasado de encabezar el ranking sectorial con un 12,4% de la oferta total, al 4,8% registrado en 2020. Este sector ha protagonizado la mayor caída (-7,6 p.p.).
¿Qué formación están pidiendo las empresas?
La gran mayoría de las ofertas laborales incluyen requisitos que hacen referencia a la formación académica. Sin embargo, la situación pandémica ha modificado ligeramente las necesidades formativas de las empresas. Durante el 2020, los estudios universitarios han dejado de ser la formación académica más requerida en las ofertas de empleo, tras sufrir una caída de más de cinco puntos porcentuales. Las titulaciones más demandadas en 2020 han sido, por este orden: Administración y Dirección de Empresas, Enfermería, Medicina y Biomedicina, Ingeniería Industrial, Relaciones Laborales y RRHH, ADE y Derecho e Ingeniería Informática.
Formación Profesional ha recogido el testigo de ser la formación más requerida, con una demanda del 41,32% en las ofertas publicadas. Esto se debe en gran medida al auge de los Ciclos Formativos de Grado Medio, cuya demanda ha aumentado tres puntos en apenas un año. Por su parte, los estudios de postgrado han sido los menos solicitados en las ofertas, apareciendo en el 1,8% de las ofertas que especifican formación.
Cuando las ofertas de empleo demandan una formación específica, no solo se trata de titulaciones académicas, sino también del conocimiento de otros idiomas. En 2019, este requisito se solicitó una de cada tres ofertas de empleo, aproximadamente. Sin embargo, la atípica situación laboral que se ha vivido en el 2020 ha propiciado un descenso en la demanda de idiomas de más de 20 puntos. En cualquier caso, el inglés sigue siendo el idioma que más valoran las empresas (66,7%), lejos del francés (12,2%) y del alemán (10,2%).
Cinco de cada diez compañías afirman haberse encontrado con dificultades para cubrir determinadas vacantes durante 2020 (un 28% menos que en 2019). La falta de profesionales con una determinada experiencia y/o competencias técnicas adecuadas, además de unas expectativas salariales demasiado altas son las razones que se esconden detrás de esa escasez de talento. Las áreas más afectadas son comercial y ventas, administración y servicios generales e ingeniería y producción.
Tener conocimientos especializados para el trabajo que se va a desarrollar, además de conocimientos generales en nuevas tecnologías, son en estos momentos las habilidades técnicas o hard skills más requeridas por las empresas. La Formación Profesional de Grado Superior es la que más se adapta al talento que necesitan (55,3%), por delante de los Grados Universitarios (37,6%). Mientras que la formación no reglada es la menos popular entre las empresas (7,6%).
Respecto a las habilidades interpersonales o soft skills que debería reunir el candidato ideal, las cinco más valoradas actualmente son: la capacidad para trabajar en equipo, para la resolución de problemas y para organizar y planificar, así como mantener una actitud positiva y tener iniciativa.
¿Qué salarios se han ofrecido en 2020?
El Informe Infoempleo Adecco 2020 recoge también un detallado análisis de los salarios que publican las empresas. Estos datos se han podido extraer gracias a la información salarial procedente de las ofertas de empleo publicadas por las compañías, así como de las encuestas realizadas a las empresas y a profesionales en activo.
En 2020, la retribución salarial media de las ofertas de empleo ha subido un 5% con respecto al año anterior, y se sitúa en 25.478 euros anuales. No obstante, el nivel retributivo varía sustancialmente en función de la categoría profesional: si bien las ofertas para directivos tienen una media salarial de 56.305 euros, las ofertas para técnicos (26.949 euros) y empleados (20.288 euros) suelen tener una media mucho menor. Los puestos de mandos, por su parte, reciben ofertas de empleo con sueldos en torno a los 34.500 euros.
Además de la categoría profesional, otra variante está relacionada con la zona geográfica donde se publica la oferta. La media retributiva de las ofertas en Extremadura, por ejemplo, se acerca a los 30.000 euros anuales; en cambio, la Comunidad de Madrid, última comunidad en cuanto a salarios se refiere, no llega a alcanzar los 23.000 euros de media.
¿Cómo han vivido los trabajadores este 2020?
En el Informe Infoempleo Adecco se ha tenido también en cuenta la opinión de los trabajadores con respecto a su experiencia profesional durante el 2020, un año marcado por la crisis sanitaria, que ha provocado despidos, ERTEs, reajuste de horarios, contratos y salarios, entre otros muchos cambios.
A pesar de las dificultades, el 82,3% de los profesionales aprueban la gestión de su empresa en la situación provocada por la COVID-19. De hecho, casi dos tercios de los encuestados calificarían la gestión como notable o sobresaliente, siendo el 8 la nota más repetida, con un 19,2%.
Un 65,4% de los profesionales consultados no han sufrido un Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE). En contraposición, la mayor parte de aquellos que sí se han visto afectados por un ERTE lo han experimentado de forma total. No obstante, más del 80% de los afectados considera que se han cumplido las condiciones pactadas con la compañía.
Otro aspecto que ha adquirido una relevancia importante durante el 2020 ha sido el teletrabajo, ya que el 76,3% de las empresas no lo utilizaban con anterioridad. A finales de 2020 había más de tres millones de personas teletrabajando en nuestro país, multiplicando por 3,2 veces la cifra de empleados con esta modalidad de trabajo (951.800 según el INE) registrada en 2019. Sin embargo, a pesar de este boom, los empleados no son optimistas a la hora de creer que su empresa vaya a facilitar el teletrabajo con la nueva normalidad. De hecho, un 54,7% cree que su empresa no les dejará seguir trabajando en remoto.
A pesar de que un 57,6% de los trabajadores quieren teletrabajar, prefieren un modelo híbrido que combine ambas opciones, trabajo en remoto y presencial. La opción más popular es teletrabajar tres días a la semana (23,9%) y desde el propio domicilio (38,2%). La necesidad de socializar con los compañeros (41,4%), la falta de buenas condiciones para trabajar en casa (19,9%), y la necesidad de desconectar (18,4%) son las tres razones más repetidas entre aquellos que no son partidarios del trabajo en remoto.
¿Y los profesionales en busca de empleo?
Las personas desempleadas se muestran pesimistas con respecto al 2021. Según los datos recogidos por las encuestas, el 44,4% considera que el mercado laboral será peor que en 2020, mientras que únicamente el 22,1% cree que mejorará y el 33,3% que se mantendrá. En esta misma línea, casi el 60% de los encuestados reconoce tener menos del 50% de posibilidades de encontrar trabajo en los próximos meses. De hecho, la opción más repetida es “0% de posibilidades”. El principal motivo de este pesimismo es la edad, aunque le sigue de cerca la opción que hace referencia a la situación general de la economía.
A diferencia de la población ocupada, las personas que actualmente no tienen empleo prefieren trabajar de forma presencial que en remoto o de forma híbrida. El principal motivo de esta opinión es para poder socializar con los compañeros (37%), aunque le sigue de cerca la idea de poder acceder a formación y promoción profesional (32,9%).