Son muchas las personas que deciden trabajar en el extranjero. Normalmente es una decisión motivada por la búsqueda de oportunidades que no han podido encontrar en España, pero también hay otros motivos, como ampliar la experiencia laboral o simplemente la exploración de nuevos horizontes y estímulos.
Si estás pensando en convertirte en una de esas personas, aquí tienes algunos consejos que te serán muy útiles.
¿Por qué trabajar en el extranjero?
Las cifras de empleo de las últimas Encuestas de Población Activa y los datos referentes a la buena marcha de la economía española permiten ser moderadamente optimistas respecto a la situación del empleo en España.
Sin embargo, no debemos olvidar que nuestra tasa de paro sigue siendo la más alta de la Unión Europea. Por lo tanto, son muchas las personas que deciden trabajar en el extranjero, especialmente aquellas formadas en campos como las Tecnologías de la Información, Ciencias de la Salud, Ingenierías y Educación (entre otros).
También es cierto que el empleo puede no ser un fin en sí mismo, si no la condición necesaria cuando se buscan estándares de vida y bienestar más altos.
De hecho, se trata de una tendencia creciente después del impass que supuso la falta de movilidad motivada por la Pandemia. Según un estudio de la Fundación BBVA e IVIE, hay un número cada vez mayor de personas las que buscan sus oportunidades de empleo fuera de España.
En cualquier caso, siempre será un desafío estimulante y que pondrá a prueba tu capacidad de adaptación.
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Algunos consejos muy útiles cuando decides trabajar fuera
El colectivo de personas que deciden trabajar al extranjero, ya lo has visto, es muy diverso y responde a múltiples motivaciones y por lo tanto responde a diferentes necesidades en función de sus circunstancias.
A pesar de ello, hay una serie de desafíos que son comunes a la mayoría de las circunstancias y, salvo que tu historia personal resulte muy singular, te conviene tomar nota de ellos:
- Investiga el mercado laboral del país que hayas elegido, cuáles son las necesidades de su mercado laboral. Si se trata de un país de la Unión Europea, aquí te será muy útil la página web del SEPE, donde ofrecen ofertas proporcionadas por EURES (EURopean Employment Services). También puedes consultar la sección de Empleo Internacional de nuestro portal.
- No vayas a donde no te necesiten. Haz una autoevaluación severa de tu perfil laboral y asegúrate de que encaja con las demandas de trabajo de ese país.
- El idioma es siempre una barrera, y especialmente en países donde la presencia de trabajadores extranjeros es testimonial. Asegúrate de que tienes un cierto dominio de la lengua de ese país.
- No te lo pondrán fácil en todas partes. Infórmate de cuáles los requerimientos para obtener las visas de trabajo en cada país y las condiciones requeridas.
- No olvides trabajar a fondo tu networking. Contacta con personas que hayan trabajado o trabajen en tu país de destino. No solo te proporcionarán información, sino también apoyo cuando estés residiendo en él.
¿Cómo adapto mi Currículum Vítae para trabajar en el extranjero?
Como es lógico, cada país tiene sus costumbres y particularidades y la forma en que se presenta el CV es una de ellas. No te limites a traducir el que ya has usado en España antes. Te será fácil encontrar información sobre cuál es la forma en que deberás estructurarlo en función de tu destino.
Por regla general en los países de la Unión Europea se sigue el mismo modelo de CV que en nuestro país, con una presentación cronológica de los puestos que han ocupado y tu formación. Aunque en algunos la fotografía es obligatoria y en otros la norma es no ponerla.
Para la UE dispones del recurso CV Europass, que es un formato de currículum normalizado. Es fácil de cumplimentar si no dispones de mucho tiempo.
En Estados Unidos, el formato habitual de CV está centrado en las habilidades y competencias y no en la cronología, como el europeo. Algo similar sucede en Canadá.
