En este blog hemos hablado mucho de los currículums. Hojas de papel con letras resumiendo lo que mejor sabemos hacer, algunas más atrevidas, otras más convencionales. Siempre destinadas a enseñar lo mejor de nosotros mismos con la esperanza, en fin, de que alguien nos contrate. Pero quizá lo tuyo sea otro negocio y la mejor forma de enseñar tus armas sea hacer un videocurrículum.
Quizá conozcas alguna de estas célebres propuestas. Son una selección de los centenares que hay, pero quizá las más recordadas para bien o para mal. Precursores, cabezas pensantes de ideas brillantes e incluso auténticos fracasos que acaban consiguiendo lo contrario de lo que pretendían. Aquí van algunos de los videocurrículums más conocidos, por si te sirven de inspiración.
Del primero ya hablamos aquí, un clásico. Uno de los que más dio que hablar en la Red sencillamente por ser interactivo. Su autor, Graeme Anthony, alcanzó una enorme repercusión gracias a su idea: 180.000 reproducciones avalan su éxito.
Como todo lo exitoso, la idea fue readaptada por un montón de gente. Cuatro meses después aparecía, por ejemplo, la versión española con el actor, presentador y artista Juanmi Flores como protagonista. El vídeo es un poco largo, pero al final cierra con la interactividad que Graeme Anthony hizo famosa al aplicarla a su videocurrículum.
También hay videocurrículums fascinantes en cuanto a su sinceridad, mensaje y apelación a la emotividad. El caso más destacado es, sin embargo, irreal, porque fue un viral promovido por la ONCE para sensibilizar sobre la contratación de discapacitados físicos y sensoriales. En cualquier caso vale la pena verlo
Otro anuncio construido a modo de videocurriculum es este en el que Harvey muestra sus virtudes.
Por seguir con el humor, pero volviendo a lo serio, está el caso de Erin Michael, una ilustradora que compuso una canción e hizo los dibujos de esta especie de videoclip en el que se ofrece a la empresa de sus sueños. El vídeo vale mucho la pena, y su página web también.
También aplicó lo de cantar Alec Biedrzycki, con algo menos de fortuna:
Pero todo lo anterior son secuelas. Si hubo un videocurrículum primigenio y comentadísimo fue el de Aleksey Vayner, un tiburón recién salido de Yale que se grabó y envió la cinta a UBS, donde quería trabajar. Alguien del banco lo difundió entre sus contactos y ahí empezó la ola: se convirtió en un viral que arrasó internet y cuenta con su propia entrada en Wikipedia. ¿Qué hizo para merecerlo? Ser el tipo más pedante del universo, vendiéndose como un charlatán moderno que acaba enseñando cómo practica deportes y -atención- cómo rompe un montón de ladrillos con sus manos. Vale la pena verlo para saber qué es lo que no hay que hacer nunca en un videocurrículum.
De hecho, tras él empezaron a aparecer parodias más o menos logradas, aquí van un par
¿Te pareció malo? Los compañeros de Esquire hicieron una selección de los peores a su juicio, que sirven para aprender los errores más comunes que se cometen. Hay miles de propuestas más. Como esta de Lucie Le Squeren-Caulfield, actual ejecutiva de cuentas en Ogilvy, que consiguió 20.000 reproducciones de su vídeo. Más clásica, ¿verdad? Sí, pero efectiva. Si quieres algunos consejos de cómo afrontar tu videocurrículum después de ver todo esto mejor leer a los expertos: Yoriento.
1 Comentarios
Daniel Rubio
El mio está…Muy muy mal!! http://www.youtube.com/watch?v=dVSSIHlTr14