Muchos factores pueden ocasionar malestar en el trabajo. Un origen muy corriente es no haber elegido la profesión adecuada. Ya sea por que tu trabajo no te motiva y quieres dedicarte a algo que te guste, ya sea porque necesitas prosperar, puedes tratar de variar el rumbo de tu carrera profesional. Estas claves te ayudarán a conseguirlo.
Hacer balance: lo que te gusta y lo que no
Dar un giro profesional va a suponer una serie de costes. Por un lado están los costes evidentes, económicos y de tiempo. Pero hay otro que suele quedar más oculto, el coste emocional. Cuando has desempeñado una labor durante mucho tiempo, te encuentras en un estado estable, que puede acercarse al aburrimiento, pero que es estable al fin y al cabo. Un cambio va a suponer un cierto desorden emocional con el que también hay que contar.
Sin embargo, quien no cae no se levanta. Estás tratando de buscar otra vía profesional, intenta de justificar por qué. ¿Cuáles son los factores que te causan malestar en el trabajo? Definirlos te dará fuerzas cuando flaquees durante el camino del cambio.
Qué sabes hacer bien. Define tus habilidades y competencias
A todos se nos da mejor hacer unas cosas que otras. Analiza lo que requiere el puesto o el perfil profesional al que aspiras. Después repasa tu perfil, no solo profesional, sino también el personal. Los puntos en común que encuentres con lo que se está demandando serán las habilidades y competencias que aportes de base. El resto, tendrás que irlas adquiriendo a través de formación y aprendiendo de tu entorno. Con el empeño suficiente, lo más seguro es que termines reuniendo las exigencias del perfil.
Analiza el mercado
Céntrate en las oportunidades que se están dando en el sector en el que pretendes entrar. Aunque no se pueden hacer desaparecer, conviene que dejes de lado los contras, pues estás tratando de dar con el modo de acceder. Pero tampoco es plan de montarse castillos en el aire. Lo ideal es mantener una actitud optimista con un punto de prudencia. Esto te ayudará a permanecer en la senda que has iniciado sin venirte abajo ante el primer revés.
Recopila información sobre el sector para acudir a los eventos donde se concentren los profesionales, allí tendrás la posibilidad de hacer contactos. Investiga cuáles son los picos de producción durante el año, de este modo te resultará más sencillo coincidir con el momento de demanda de tu nuevo perfil.
Fórmate
Este es uno de los aspectos más importantes a la hora de reorientar tu carrera profesional. Aquí toca llevar a cabo otra labor de investigación, la relacionada con las competencias que requiere tu nuevo perfil. Créate un itinerario formativo adaptado al puesto para el que te estás preparando. Gracias a este programa, conseguirás resolver también aspectos prácticos, como combinar los estudios con tu trabajo actual o evaluar los costes económicos y de tiempo.
Establece una estrategia
Márcate unos objetivos, visualiza tu situación dentro de un periodo corto de tiempo (seis meses, por ejemplo) y más a largo plazo (cuando creas que estás preparado para dar el giro profesional completo). En función de estos momentos, elabora un plan de acción o estrategia con los pasos que debes ir cumpliendo. Hay libros sobre el cambio de rumbo profesional que pueden servirte de gran ayuda en esta fase.
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