Continuamos con la serie de entradas dedicada a prepararlo todo con mucha antelación para que la incorporación de tu hijo el curso que viene sea un éxito. ¿Es el primer año que entra en el cole o estás pensando en cambiarlo de centro? Ayúdate de nuestro comparador de colegios. El primer día que pise terreno escolar, no debe parecer que entra al campo de batalla. Todo lo contrario, puede convertirse en un día emocionante que recuerde toda su vida.
A cada edad, a los niños les preocupa una cosa distinta. No se abordará de la misma manera el primer día un niño de 6 años que el de su hermana de 10. También hay que ponerle atención al carácter de cada cual. El colegio es un centro muy social, donde los niños establecen las bases para el futuro de sus relaciones con las personas que les rodean. Muchas veces, es representativo de los comportamientos adultos, pero no hay que dejarse llevar por esta idea.
Es muy importante interpretar los hechos desde la mirada infantil, sintonizar con sus temores y sus alegrías, y no sacar de contexto las situaciones. Los adultos son los responsables ante los niños, no tienen que ser los niños los responsables de una metedura de pata de sus padres o tutores. Así pues, hay que actuar con cautela y grandes dosis de comprensión.
Combinar el primer día de cole con el trabajo
Si este año tu hijo se va a enfrentar a un cambio importante en su vida, como es empezar el colegio, pasar de etapa o bien mudarse de centro, es lógico que te encuentres más preocupado que otros años.
Estás a tiempo de visitar los centros en las jornadas de puertas abiertas para conocer in situ las instalaciones en las que estudian y corretean los niños. Además, te explicarán el proyecto del centro y la línea pedagógica que siguen.
Antes de solicitar todas las vacaciones de verano, puedes plantearte dejar unos días para poder cubrir, por ejemplo, el periodo de adaptación. Sin embargo, no siempre es posible. En muchos centros disponen de una alternativa para que los niños que no pueden ser recogidos a la hora recomendada, no se queden sin atender. Si tienes la oportunidad de cambiar turno con tus compañeros, quizá esta sea también una buena solución.
Otros recursos son recurrir a los preciadísimos abuelos o a terceras personas que pueden acompañarlos durante este periodo. Avisarlos con la suficiente antelación evitará disgustos y enfados de última hora.
Para que se vayan haciendo a la idea…
Como hemos dicho al principio, el primer día de colegio puede convertirse en una jornada emocionante. Lo importante es prepararlo bien, aunque luego no salga todo exactamente como habías planeado. A todos nos sucede, lo desconocido echa para atrás. Por eso es conveniente que hables con tu hijo de este momento (siempre en función de su edad) u anticipéis las dudas y temores que puedan surgirle.
Cuando se vaya acercando la fecha, hay rituales sencillos que pueden ser muy efectivos, como ir a elegir material escolar, forrar los libros del curso, adaptar el espacio de estudio en casa o conocer el nombre de sus nuevos profesores o de algunos compañeros, por ejemplo.
Si vas trabajando todos estos aspectos, los niños serán capaces de afrontar la nueva situación con mayor seguridad y sin desasosiego.
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