Si, a pesar de tener un puesto de trabajo, estás a la búsqueda activa de empleo probablemente encuentres una oferta cuyas condiciones te satisfagan. Llega el momento entonces, de plantearse una salida elegante de tu actual empresa. El primer paso será redactar un documento de baja voluntaria. Si, además, en la otra empresa te piden empezar de inmediato valora el hecho de que no vas a poder dar un preaviso a tu actual empresa.
El preaviso, es decir, la obligatoriedad de avisar con tiempo suficiente de que te marchas de la empresa (normalmente 15 días), es algo que suele venir establecido por convenio o, llegados a los tribunales, lo que se haya tenido por costumbre en estos casos.
El preaviso, obligatoriedad y cortesía
Avisar con tiempo es una formalida19d de sentido común cuando eres tú quién se marcha. La baja de un trabajador normalmente supone un grave perjuicio en la empresa ya que planificación se resiente y las tareas asignadas quedan de pronto sin responsable. Por este motivo el empresario puede descontar del finiquito los días que restan hasta cumplir con el plazo legal para preaviso.
Las consecuencias en el otro sentido, el despido de un trabajador sin preaviso por parte de la empresa, también pueden llegar hasta los tribunales y suponer un despido improcedente.
Los efectos negativos que tiene la baja voluntaria de un trabajo sin preaviso la hacen totalmente desaconsejable. Existen otras opciones menos drásticas como es la solicitud de una excedencia. Para solicitarla tendrás que llevar mínimo un año en la empresa.
Una baja voluntaria sin comunicación con suficiente antelación deja un mal recuerdo como trabajador en la empresa. La vida da muchas vueltas y quién sabe si tendréis que veros de nuevo las caras en un contexto laboral.
Baja voluntaria sin preaviso
Aún así, en ocasiones no se puede dar el preaviso porque en la otra empresa nos piden incorporación inmediata. En este caso toca echar mano de asertividad, explicar de la mejor forma posible cuáles son los motivos para que no puedas cumplir con el acuerdo de preaviso. Algo que puedes hacer para compensar, y apuntarte un tanto por si acaso, es ponerte a disposición de la empresa para formar a la persona que te sustituirá.
Consecuencias de una baja voluntaria
Una cosa importante que tener en cuenta es que, si te das de baja voluntaria de un trabajo, no tendrás derecho al paro ya que es condición indispensable haber perdido de forma involuntaria el empleo. Dentro de esta involuntariedad están contempladas causas ajenas al trabajador como la ubicación en otra provincia de la empresa o, en caso de que se sea víctima de violencia de género, tener que abandonar el empleo.
Independientemente de cuál sea el procedimiento, con o sin preaviso, lo recomendable es hacer un escrito donde se informe de la intención de causar baja en la empresa. En el documento no es necesario explicar los motivos.
Aunque seas tú quién se va tienes derecho al cobro de las cantidades que han quedado pendientes: lo correspondiente al mes en curso y la parte proporcional de vacaciones que no hayas disfrutado, así como la parte de pagas extras no cobradas anteriormente. Es lo que se conoce como finiquito.