En el año 2018 las titulaciones de FP marcaron un hito en la historia de la formación y el empleo. Por primera vez las ofertas de empleo que incluían una titulación de formación entre sus requisitos pedían más titulados de FP que universitarios. Esta tendencia se ha consolidado durante el año de la pandemia hasta el punto de incrementarse en cinco puntos. Una nueva edición del Informe Infoempleo Adecco aporta los detalles sobre este “sorpaso” sobre la formación universitaria.
Las empresas demanda en mayor medida titulados en FP
El número de ofertas que solicitan titulación de FP fue del 41,3% durante el año pasado, según refleja la nueva entrega de este documento de referencia que analiza las ofertas de empleo en España. Este porcentaje ha supuesto una remontada respecto al año anterior (38,8%) en el que se estancó esta tendencia tras cinco años consecutivos de aumento de la empleabilidad de los titulados de FP. En 2018 las solicitudes de titulados en FP alcanzaron el 42,4%.
Sin embargo, la sacudida sobre el empleo que ha provocado la pandemia hace necesaria la cautela en la comparación de datos entre ambos años. La diferencia es significativa en aquellos sectores que más se han visto afectados por las restricciones y la paralización de la actividad. Es el caso, por ejemplo, de la construcción, que lideraba el ranking de las de ofertas que requerían de titulación de FP más demandadas en 2019 pero que ha descendido hasta la sexta posición en esta última edición debido a la interrupción de muchas obras durante el confinamiento.
El desplome del empleo en las actividades relacionadas con la hostelería y turismo debido a las restricciones también ha quedado retratado en cuanto a las ofertas con requisitos de formación profesional. Las ofertas para titulados de FP para este sector las colocaban en tercera posición en el año 2019 (5,89%). En el 2020 ha caído hasta el séptimo puesto (4,05%).
Comercio y distribución minorista las especialidades de FP más demandadas por las empresas
En sentido contrario ha ocurrido con otros ámbitos como el sanitario o el del comercio y la distribución minorista. Atendiendo a la distribución sectorial de la oferta de empleo para titulados de FP en el año 2020 el área de sanidad ha supuesto un incremento notable. El 5,43% de las ofertas de sanidad iban dirigidas a titulados de FP en el año 2020 mientras que en 2019 no alcanzaron ni el 1%.
Estos buenos datos también se han reflejado en el caso del comercio y la distribución minorista, según se señala en el informe. Un 9,5% de las ofertas de este sector pretendían incorporar a quienes tuvieran un título de FP frente al 3,94% de las ofertas en el año 2019. Ha sido el sector que más ha demandado perfiles con titulación profesional.
Las titulaciones universitarias bajan, aunque crecen las demandas de las sanitarias
Las empresas han bajado su demanda de titulados universitarios durante la crisis sanitaria llegando a descender hasta cinco puntos. No obstante, tres de cada diez ofertas con requisitos de titulación piden estudios superiores. El aumento de la solicitud de estos titulados en la rama sanitaria da cuenta del protagonismo que estas especialidades que han tenido en la gestión de la crisis. En 2019 un 15,1% de las solicitudes de personal pedían una titulación superior en la rama sanitaria. En 2020 se ha incrementado hasta un 24,1% con especial relevancia en los titulados en Enfermería (6,85%), lo que la sitúa en segunda posición; Medicina y Biomedicina (5,24%), en tercer puesto. ADE (11,26%), sigue liderando la lista de ofertas con titulación universitaria.
La formación cada vez juega un mayor papel en la empleabilidad. Los puestos que han sufrido una mayor destrucción durante la crisis han sido aquellos de escasa cualificación con el agravante de que aumenta las posibilidades de caer en paro de larga duración. Según advierte la OCDE en su reciente informe “Perspectivas del mercado laboral 2021”, la capacitación para afrontar la transición a profesiones con mayor potencial de crecimiento, como por ejemplo el empleo verde, es uno de los mayores retos que deben asumir las sociedades. Y debe hacerse orientado hacia el aprendizaje a lo largo de toda la vida profesional y con una especial atención a la formación en las empresas.