Según el último Informe Infoempleo Adecco, a cuatro de cada diez personas que trabajan les falta motivación personal para llevar a cabo sus tareas. La causa principal que dan es que no se les reconoce su labor, pero también hay otras razones muy importantes, como cobrar un salario inadecuado o caer en el tedio de hacer siempre lo mismo. ¿Estás en esta situación y quieres encontrar motivación? Sigue estos consejos.
Muchas veces tener un referente resulta más efectivo que cualquier recomendación que pueda llegarte. Ejemplos de motivación podemos encontrarlos todos los días en deportistas, profesionales de prestigio reconocido y que aman lo que hacen, amistades y familiares que conocemos bien o incluso en los personajes de tus series favoritas. Si sientes admiración por alguien que te parezca ejemplar, imagínalo en tu situación y trata de pensar qué haría en tu situación. Quizá te sugiera una nueva actitud con la que poder hacer frente a lo que vives cada día.
También puedes probar estas tres prácticas que te proponemos a continuación.
1. Superar la falta de reconocimiento
Como hemos apuntado al inicio, en la encuesta que se ha realizado para el Informe Infoempleo Adecco los trabajadores señalan que sentir que no te valoran es la principal razón para la desmotivación, por delante incluso de que el salario sea insuficiente. Según la pirámide de Maslow, conseguir reconocimiento es una de las necesidades primordiales que nos encaminan a la autorrealización. Cuando no ves la manera de cambiar esta situación porque no depende de ti, llega el momento de poner cada cosa en su sitio. Tu persona está mucho más allá de lo que expresan tus superiores o compañeros sobre ti.
Por otro lado, hay a quien le motiva muchísimo su trabajo y se realiza como persona a través de él. Pero la autorrealización no tienes por qué encontrarla en este ámbito. Tu trabajo puede ser el soporte material que hace posible que disfrutes de lo que te realiza en cuanto abandonas tu puesto. Tus aficiones, tu faceta de voluntariado o dedicarte a tu familia, entre otras muchísimas actividades. Si encuentras tu motivación fuera del trabajo es muy posible que cambies tu concepto sobre este, porque representa tu sustento y te proporciona estabilidad para que sigas manteniendo lo que te hace feliz.
2. Vivir en el presente
La filosofía del mindfulness o la atención plena puede impregnar todas las facetas de tu vida, también el trabajo, especialmente si te genera estrés o insatisfacción. Notarás un cambio si practicas el vivir el momento presente, poner atención en lo que estás haciendo. No te anticipes al futuro de una manera estéril, ni te enganches del pasado pensando en las malas decisiones que te han llevado a la situación actual.
Esto no quiere decir que no reflexiones; tan necesario es planificar para llegar a metas como analizar los errores para tratar de no reproducirlos. Lo que no te servirá de nada es acudir al pasado o al futuro con rumiaciones, con lamentos y anticipaciones que no resuelven nada ni en la actualidad ni siquiera en el futuro. Trata de estar en la tarea en la que estás. No pienses en cada minuto que falta para que termine la jornada, ni tampoco en lo que te pesa todo lo que llevas acumulado.
Si quieres cambiar la situación, ponte manos a la obra. Mientras tanto, ser consciente del momento presente te ayudará a superar la falta de motivación.
3. Introducir un aliciente
Otra de las principales razones que se señalan en el Informe para sentir desmotivación en el trabajo es cansarse de hacer siempre lo mismo. Muchas veces la falta de motivación va asociada al aburrimiento y esto se agrava si no sabes cómo salir de la situación en que te encuentras. Puede que halles la salida a esta situación si tratas de ahondar un poco en tu profesión.
Un buen comienzo puede ser investigar nuevos horizontes dentro de tu gremio y ponerte al día de lo que se hace fuera de tu empresa. Si consigues enriquecer tu red de relaciones, también te ayudará a superar el tedio de ver las mismas caras todos los días.
