Seguro que eres una de las personas que han disfrutado con la película multipremiada Nomadland. Pero también serás de quienes han descubierto un mundo laboral simultáneo y hasta ahora desconocido. Esos nómadas son distintos de los digitales que vas a conocer aquí, pues estos últimos viajan y trabajan en línea con libertad geográfica. Para determinados perfiles esta condición ofrece muchas ventajas, pero no todo es maravilloso.

¿Conoces algún nómada digital?

Quienes forman parte de este colectivo se caracterizan por no contar con un hogar fijo, sino que viajan por distintos lugares, trabajando desde su dispositivo por internet. Los horarios son flexibles, porque lo que se valora son los resultados. Por tanto, este perfil tiene libertad geográfica y mayormente horaria. Aunque al coordinarse en línea con el equipo también debe ajustar los distintos husos horarios de cada lugar. TIP: potencia tu marca personal y trabaja la comunicación de tu proyecto desde el minuto cero.

Algunas de las profesiones que se ajustan a este perfil son: consultores, nutricionistas, psicólogos, profesores, diseñadores o desarrolladores web, redactores o creadores de contenido para blogs y agencias. Si realizas un trabajo creativo es más probable que puedas digitalizarlo. Cabe distinguir distintos tipos de nómadas digitales:

  • Freelance: Cuanto más segmentado esté el nicho al que te diriges, mayor probabilidades de éxito tendrás. Como nómada digital los clientes los buscas y los consolidas tú.
  • Emprendedor: Asumes mayores riesgos pero ganas dinero también fuera de las horas de trabajo. Es posible gracias a los ingresos pasivos de infoproductos y al ecommerce. TIP: Crea el proyecto y el canal de venta antes de arrancar a viajar.
  • Por cuenta ajena: este modelo te será familiar especialmente tras la pandemia y la implantación del teletrabajo como norma en muchos sectores. Piensa además que, desde hace décadas, el trabajar en una oficina no implica necesariamente estar dado de alta por la empresa que te contrata, sino que tu trabajo es como freelance. Por la misma razón, ahora puedes ofrecer tus servicios deslocalizado de la oficina pero en nómina de la compañía que contrata.

¿Conoces algún nómada digital?

Son muchas más las ventajas de ser nómada digital si se ajusta a tu personalidad:

  • Conocerás gente nueva y alineada con tu modo de vida.
  • Aprenderás idiomas.
  • Ampliarás tu mirada cultural.
  • Podrás viajar más allá de las vacaciones.
  • Mayor control sobre tus ingresos

No es oro todo lo que reluce

Una de las principales condiciones que mencionan quienes llevan los últimos años trabajando como nómadas digitales es la soledad y la carencia de un refugio al que acudir en los momentos bajos. Pero también hay que contar con que en muchas ocasiones el equipo de trabajo es tu ordenador personal, con lo que eso conlleva de protección de datos y de mantenimiento. Debes ser consciente, además, de que tendrás que estar actualizado y en constante formación, como un knowmad digital.

Es fundamental marcarse rutinas que te permitan alcanzar los objetivos y, a su vez, prevenir riesgos laborales. Para ello, asume y acepta las limitaciones que te vayas encontrando. El cuidado de la salud en este perfil es especialmente relevante. Debes reservar tiempo de desconexión digital, hacer ejercicio físico periódicamente y micro descansos que te alejen de la pantalla.

Por último, tu trabajo depende de una buena conexión a internet, una cámara y micro en condiciones, especialmente si haces directos o webinar, un disco duro externo para no perder nada esencial realizando backup periódicamente y, como buen viajero y nómada digital, nunca olvides tu adaptador de corriente universal.