A menudo se ha especulado con la información que redes sociales como Facebook o LinkedIn ofrecen a los reclutadores. No en vano, muchos de ellos recurren a estos sitios para confirmar al candidato ideal para un puesto de trabajo. Pues bien según un estudio de la Universidad de Old Dominion de Virginia, hay ciertos rasgos de la personalidad de las personas que sirven para predecir cómo se comporta (o se comportará) dicha persona en el trabajo y estos rasgos, han concluido, están normalmente a la vista de todos, amigos y reclutadores, ya que aparecen en nuestro propio perfil de Facebook. Los resultados de esta investigación se presentarán esta misma semana en una de las citas más importantes en el mundo de la Psicología, la 29ª Conferencia Anual de SIOP en Honolulu, Hawaii.

El estudio dirigido por los profesores Richard Landers y Katelyn Cavanaugh lleva por título Incremental Validity of Social Media Ratings to Predict Job Performance. En él participaron 146 personas que compaginaban estudios y trabajo. Todos ellos completaron un test online de personalidad donde definían sus principales virtudes y defectos. En paralelo un grupo de observadores clasificó a los candidatos en función de ciertos rasgos de la personalidad muy característicos como la amabilidad, la neurosis, la escrupulosidad ó la extraversión. Esta clasificación se hizo atendiendo a los perfiles de Facebook de todos ellos. Y por último, los jefes de todos los estudiantes-trabajadores evaluaron el rendimiento que daban en el trabajo.

Y lo más curioso del estudio es que el grupo de expertos pudo deducir con certeza muchas más cosas de los candidatos viendo sus perfiles en Facebook que con el autotest que todos ellos hicieron. Y es que no todo el mundo se conoce lo suficiente a sí mismo como para poder detallar rasgos de su propia personalidad en el contexto de una prueba.

Además, tal y como afirma la profesora Cavanaugh, «en facebook no sólo se puede encontrar información actualizada sobre el perfil de alguien sino que también se puede acceder a un registro histórico del comportamiento de esa persona». Un test de personalidad revela los rasgos de esa persona en un momento determinado. Pero nunca te dirá si siempre ha sido así o no. Un test de personalidad, apunta Landers, «es más fácil de falsificar porque los solicitantes pueden intuir las respuestas que busca la empresa que los tiene que contratar».

En concreto, los dos investigadores afirman que el rigor y la extraversión son los dos rasgos psicológicos que mejor nos definen en el trabajo y que están a la luz pública a través de Facebook.

Con rigor o escrupulosidad, los dos investigadores se refieren a una serie de hábitos como la puntualidad, el nivel de organización, la determinación para terminar una tarea, o el ser consciente de los deberes de cada uno.

La capacidad de extroversión es otro rasgo determinado sobre todo en determinados empleos de cara al público o que exijan trabajo en equipo.

Por último, tanto Cavanaugh como Landers afirman que la información que contienen nuestros perfiles de Facebook nunca es suficiente pero sí que es una herramienta adicional fundamental para acertar a la hora de contratar a una persona. Y eso sí, advierten además que hay determinados aspectos legales con los que los empleadores deben tener cuidado para no discriminar por ejemplo a nadie por su raza, sexo o religión ya que se incurriría en un delito.

Etiquetas